California y Texas son los principales estados donde operan grupos supremacistas blancos estadounidenses, de acuerdo con reportes del FBI y de diversas asociaciones civiles.
Unos 140 colectivos que se rigen bajo las leyes del odio racial se extienden por buena parte de la frontera sur de Estados Unidos, en tiempos en los que los flujos migratorios provenientes de México y Centroamérica se han convertido en bandera política de demócratas y republicanos rumbo a las elecciones legislativas de noviembre próximo.
Así lo reveló una investigación periodística realizada por el diario mexicano Milenio, basada en la consulta de archivos del propio Gobierno estadounidense, específicamente de instituciones como el Buró Federal de Investigaciones (FBI).
Se trata de grupos supremacistas blancos y contingentes de odio que se mueven, principalmente, por Texas y California, dos de los estados de ese país norteamericano con la mayor población de origen hispano.
En los grupos detectados operan ideologías neonazis y antinmigrantes, por lo cual todas sus acciones se llevan a cabo con base en nociones supremacistas que contemplan una nación dominada y poblada por blancos.
La asociación civil Southern Poverty Law Center identificó que, en los últimos cuatro años, se cometieron más de 1.000 crímenes relacionados en contra de la comunidad hispanoamericana en Estados Unidos.
Entre los grupos supremacistas con más actividad en la frontera están Californians for Population Stabilization y American Border Patrol. Ambos tienen como finalidad impedir la entrada de migrantes a su país. Generalmente, lo hacen con métodos violentos, desde intimidaciones hasta asesinatos.
"Los estados que colindan con México y con mayor número de grupos son California, con 65, y Texas, con 52, donde ha ocurrido una de las mayores tragedias en contra de la comunidad mexicana, cuando en el año 2019 un hombre blanco ingresó a una tienda Walmart y asesinó a ocho mexicanos", describe el diario Milenio.
Según la investigación, de los 733 grupos supremacistas que existen en Estados Unidos, 140 se extienden por la frontera sur. De hecho, también tienen presencia en Arizona y Nuevo México.
Con el fin del Título 42 —política a través de la cual las autoridades estadounidenses pueden expulsar migrantes de forma inmediatamente por "razones sanitarias" asociadas a la pandemia de coronavirus—, se espera que más personas deseen entrar a suelo norteamericano y, con ello, los extremistas blancos intensifiquen sus ataques en contra de los migrantes, advirtieron asociaciones civiles.
"La American Border Patrol asegura que los inmigrantes mexicanos han llevado a Estados Unidos el crimen, las drogas y la miseria. Que son un 'cáncer cultural' y siguen un plan secreto: el de Aztlán, para completar 'la reconquista' del sur de Estados Unidos", asegura el reportaje, firmado por la periodista mexicana Laura Sánchez Ley.
Entre los grupos radicados en Estados fronterizos está el Californians for Population Stabilization, se han declarado abiertamente a favor de la “estabilización” de la población; y la American Border Patrol, que impiden a como dé lugar que entren más #inmigrantes a ????????.
— Eunice Rendón (@EuniceRendon) May 18, 2022