Amable lector, seguro alguna vez se ha sentido “Juan Camaney” en cierto momento de su vida y de golpe ha recibido una cubetada de la fría realidad que no esperaba.
Por ejemplo, en la universidad este columnista llegó muy ufano a presentar un ensayo creyéndose el rey del mundo, pero el profesor leyó dos párrafos y arrojó el trabajo a la basura, pues la redacción era terrible.
Así merito les está pasando a los Mier, que se están hundiendo solos en Puebla gracias a sus desafortunadas acciones, que los han dejado mal parados ante la sociedad.
Comenzamos por Ignacio Mier Velasco, el “flamante” coordinador de la bancada de MORENA en el Congreso de la Unión, que en la discusión por la Reforma Eléctrica terminó reducido a un Eduardo Alcántara Montiel cualquiera.
Lo destrozaron en la tribuna, en redes sociales y hasta el mismo gobernador Luis Miguel Barbosa le bajó los ánimos al descartarlo como aspirante a la gubernatura, pues sentenció que Mier Velasco nunca ha pertenecido a la izquierda.
¡Uf!
El único que se atrevió a defenderlo fue ese periodista de voz chillona que sueña con ser candidato a la alcaldía de Puebla… Ah y que recibe órdenes directas de Mier.
El otro caso es el de Daniela Mier, la legisladora local de MORENA que pese a sus intentos no termina por caer bien a la gente.
La diputada, me cuentan, regaló cubetas en la Feria de la Gordita y lo único que recibió fueron señas obscenas y silbidos de la gente, mostrando que el hartazgo al apellido Mier comienza a ser insostenible.
Mundo Tlatehui, a favor de la ley y la transparencia
Este jueves se supo de la inhabilitación por 7 y 8 años de dos exfuncionarios del Ayuntamiento de San Andrés que estuvieron en el periodo de Leoncio N. como alcalde.
La noticia fue motivo para que se le cuestionara al presidente municipal sanandreseño, Edmundo Tlatehui Percino, su opinión al respecto.
Muchos le quisieron tirar algún buscapiés, otros le intentaron sacar alguna declaración fuera de lugar, pero Tlatehui siempre se mostró con respeto absoluto por la ley y la transparencia.
Este columnista tuvo la oportunidad de entrevistar al alcalde de San Andrés, quien claramente dijo que tendrá un acercamiento con las áreas correspondientes para conocer de cerca este caso, además de que estos exfuncionarios tendrán que rendir cuentas.
Pero lo más importante es que sentenció: “siempre he dicho que la información del Ayuntamiento, de esta administración y de las pasadas, es información pública y siempre estará a la orden de la instancia o dependencia que corresponda”.