El tramo cinco del Tren Maya, unos 110,1 kilómetros que unirán Cancún con Tulum pasando por Playa del Carmen, es uno de los más jugosos de la megaobra por su conexión entre dos puntos prioritarios del turismo en México, y un juez determinó suspender su construcción.
El juzgado primero de distrito de Yucatán concedió este lunes 18 de abril suspender de manera provisional las obras de construcción del tramo, que podrán ser retomadas hasta que se resuelva el amparo interpuesto por buzos de cuevas y cenotes.
El juez determinó que las obras del tramo cinco sur del Tren Maya, concretamente la conexión entre Playa del Carmen y Tulum, podrían provocar un daño irreparable en la zona toda vez que no cuentan con autorizaciones previas de impacto ambiental.
Y ordenó "que no se permita la ejecución de obras relacionadas con su construcción, infraestructura, remoción o destrucción de la biodiversidad del terreno o cualquier otra actividad que implique su ejecución material".
Especialistas que acompañaron la promoción del amparo argumentaron que este tramo de la obra proyecta pasar por encima de cenotes, ríos subterráneos y sistemas milenarios de cuevas, lo que amenaza el equilibrio ecológico de la zona.
La organización Defendiendo el Derecho a un Medio Ambiente Sano A.C. (Dmas) celebró la determinación judicial aunque consideró que todo el Tren Maya debe ser cancelado, no sólo el tramo cinco.
En su conferencia matutina, el presidente Andrés Manuel López Obrador, promotor de la megaobra, consideró que el tramo cinco no amenaza cenotes ni aguas subterráneas, por lo que los pobladores dieron autorización a la obra.
Junto con el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA), ubicado en el noreste del Estado de México, y la refinería de Dos Bocas, Tabasco, el Tren Maya es una de las obras prioritarias del sexenio de López Obrador, quien asegura que el medio de transporte detonará el desarrollo económico de la zona por la derrama económica que permitirá al mejorar el flujo turístico en la Península de Yucatán.
Diversos actores sociales, incluidos artistas de la farándula como Natalia Lafourcade y Eugenio Derbez, han asegurado que el Tren Maya podría traer afectaciones ambientales a la selva yucateca, además de deterioro en las zonas arqueológicas de la región.
En tanto, López Obrador defiende su proyección del tren y mantiene la promesa de que la obra se concluirá durante su mandato, que concluye en diciembre de 2024.