Empleados de Tesla en Shanghái dormirán en el piso con tal de no paralizar la producción

La ciudad china de Shanghái ha endurecido las medidas para contener la expansión del coronavirus, debido a esto, múltiples empresas detuvieron temporalmente su producción, en este sentido, Tesla anunció que con el objetivo de volver al trabajo, los empleados de la organización deberán vivir durante un tiempo dentro de la fábrica, por lo que tendrán que dormir en el piso.

La empresa explicó que cada empleado recibirá un saco de dormir, un colchón y un régimen de comidas para que no se expongan a un contagio que paralice la planta. La compañía ha tomado esta medida apoyándose en la solución planteada por las autoridades del país, que proponen un modelo de “circuito cerrado”, en el que se trabaja y vive en el mismo sitio.

Debido a que la fábrica no está acondicionada para ese propósito, los trabajadores tendrán que acomodarse en el suelo para dormir. Este nuevo sistema comenzó durante la madrugada de este lunes, aunque la producción se reanudará el martes, además, se tiene planeado que esta forma de trabajo se mantenga hasta el próximo 1 de mayo, aunque esto puede variar según la evolución de la pandemia.

Por otro lado, Tesla anunció que se habilitarán espacios de catering, duchas y entretenimiento, además, como compensación, a cada trabajador se le abonarán 400 yuanes diarios en función de su posición en la empresa.

Con el objetivo de evitar contagios, los empleados tendrán que hacerse una prueba diaria durante los primeros tres días, se les tomará la temperatura dos veces cada jornada y tendrán que lavarse las manos cuatro veces. La empresa explicó que solo los trabajadores que vivan en complejos residenciales con bajo riesgo de contagio y aquellos que tengan el esquema completo de vacunación pueden volver a la fábrica.

La planta de Tesla en Shanghái estaba cerrada desde el 28 de marzo, por lo que sufrió un retraso en la producción de 40,000 vehículos. Para recuperar parte de la fabricación perdida, la empresa ha adoptado un nuevo formato de trabajo, en el que a los empleados se les pide trabajar 12 horas cada jornada, durante seis días seguidos.

Este sistema contrasta con el modelo anterior, en el que los trabajadores cubrían turnos de 8 horas, trabajando cuatro días seguidos y descansando dos.