Científicos de la Universidad de Bonn, en Alemania, revelaron que los peces mbuna cebra y las rayas de agua dulce son capaces de elaborar operaciones matemáticas sencillas pese a que estas habilidades no son muy necesarias para su supervivencia.
El estudio publicado en Scientific Reports probó si ocho mbuna (Pseudotropheus zebra) y otras rayas de agua dulce (Potamotrygon motoro) podían ser entrenados para efectuar sumas y restas -que abarcan los números del uno al cinco- a través de una sistematización de colores y el resultado fue positivo.
Los animales iniciaron el proceso reconociendo el color azul como símbolo de suma (+1) y el color amarillo de resta (-1) para posteriormente mostrarles cartas con formas de estos colores y finalmente ponerles de frente dos puertas que contenían tarjetas con diferentes números de formas, una de las cuales era la respuesta correcta.
Si a un pez se le mostraba una tarjeta con tres formas azules, sumaba uno a tres y nadaba a través de una puerta que contenía la tarjeta con cuatro formas. Cuando los resultados eran positivos, los animales recibían un premio, situación que facilitó la participación de estos.
En general, los resultados de esta investigación fueron positivos y demostraron que a ambas especies se les facilitaban más las sumas que las restas e incluso, que entre ellos había una brecha de tiempo e inteligencia.
Los mbuna aprendieron a llevar a cabo estas operaciones en una media de 28 sesiones y las rayas en 68, pero comparando la media de respuestas correctas, los primeros obtuvieron un 78% en las sumas y un 69% en las restas, mientras que la segunda especie un 94% en las adiciones y 89% en las sustracciones.