El partido entre los Toronto Raptors y los Indiana Pacers fue detenido tras un incendio que inició en un parlante y obligó al público a desalojar el Scotiabank Arena de la capital de Canadá.
La evacuación inició durante los primeros periodos del partido y posteriormente, ninguno de los 19,800 espectadores pudo quedarse hasta el final. El incendio afectó a la tribuna que estaba detrás del aro oriental y rápidamente alertó a los participantes por los problemas de sonido y el extraño olor que había en el recinto.
“Yo me pregunté por qué no habían vendido los boletos para esos asientos… Entonces vi a los bomberos ahí”, declaró Nick Nurse, entrenador de los Raptors. “Podías percibirlo, definitivamente… Para el momento en que el partido se detuvo, el olor era muy penetrante”, completó el entrenador de los Pacers, Lloyd Pierce.
Cuando restaban 4:05 minutos del segundo cuarto, los jugadores y el personal administrativo anunciaron la suspensión del partido tras el inminente desastre. Los bomberos llegaron y, con cuerdas, lograron bajar los altavoces que seguían emitiendo humo hasta que fue controlado con sus extinguidores.
Cuando la situación se estabilizó, los bomberos determinaron que el partido podía ser reanudado pero la tribuna no volvió a alojar el estadio. Los resultados favorecieron a los Toronto Raptors, que lograron quedar en el sexto lugar de la tabla de posiciones de la Conferencia Este.
