Hasta hace unos años, los viernes de cuaresma se consideraban sagrados por las familias mexicanas, que no dudaban en respetar el mandato religioso donde se prohíbe el consumo de carne roja en dichos días.
De esta manera, miles de mexicanos visitaban los mercados para comprar pescados y mariscos, a fin de respetar esta creencia religiosa, por lo que en las mesas de muchas familias podíamos ver este tipo de alimentos en lugar de la carne.
Con el paso de los años esta costumbre se ha ido perdiendo y ya son menos las familias que siguen respetando el no comer carne en los viernes de cuaresma, además de que el costo de pescados y mariscos se ha elevado considerablemente.
La iglesia católica incluso es más permisiva, pues desde el mismo Vaticano se ha señalado que se puede consumir carne, siempre y cuando los creyentes hagan otro tipo de sacrificios u oración durante la cuaresma.
De esta manera, en ciudades como Puebla es común ver en los viernes de cuaresma los trompos de carne al pastor o árabe listos para ser vendidos a los poblanos, que no dudan en devorar estos alimentos pese a que es cuaresma.
Seguramente, esto será una constante durante los próximos años hasta que se elimine por completo la costumbre de no consumir carne en los viernes de cuaresma.
