Poblanos tiran la toalla y dejan de lado pruebas COVID-19

Poblanos tiran la toalla y dejan de lado pruebas COVID-19

Foto: Enfoque

La variante ómicron ha pegado fuerte en Puebla y la muestra es que la semana pasada se rebasaron los mil contagios diarios, cifra récord para la entidad en todo lo que va de la crisis sanitaria.

 

La preocupación de los poblanos era evidente, pues por varios días se pudieron ver los laboratorios y unidades donde se llevan a cabo pruebas COVID-19 completamente llenos de personas que querían confirmar o descartar un contagio.

 

Un alto porcentaje de poblanos que se hacían esta prueba resultaban positivos, por lo que más personas acudían a hacerse estos estudios, pues muchos habían tenido contacto directo con conocidos infectados.

 

 

 

 

No obstante, en los últimos días parece que los poblanos han tirado la toalla y ya prefieren no someterse a la prueba para detectar el COVID-19, lo que representa un riesgo de salud pública en estos momentos.

 

Y es que muchos poblanos han optado por ocultar los síntomas o incluso calificar un contagio como gripa, provocando que otras personas resulten contagiadas y el número real de casos sea desconocido.

 

El riesgo es mucho mayor para adultos mayores, pues confían que sus familiares están sanos y en caso de no estar seguros se hacen la prueba, algo que ya no sucede en estos momentos en el estado de Puebla.

 

Al no tomar las medidas de prevención por no tener una confirmación de contagio, muchos poblanos siguen llevando a cabo sus actividades normales, esparciendo el virus entre compañeros de trabajo y familiares.

 

En el mejor de los casos, determinan aislarse unos días en lo que desaparecen los síntomas, aunque esto muchas veces no es garantía y todavía podrían estar pasando por el contagio y perjudicar a terceros.

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