Un centenar de niños de entre 9 y 11 años fue vacunado contra el covid-19 con agua debido a una negligencia, en la ciudad de Santander, en el norte de España, según han admitido sus autoridades sanitarias.
Ocurrió el pasado día 18 de enero en el punto de vacunación “El Alisal”, de la capital de la región de Cantabria, donde “en el disolvente que se utiliza para preparar la vacuna se utilizó agua para inyección, cuando el laboratorio propone utilizar suero fisiológico”, explicó este viernes a los medios Antonio Martínez, director médico de Atención Primaria del Servicio Cántabro de Salud.
Martínez señaló que uno de los enfermeros se dio cuenta del error en el momento, con lo que se interrumpió la vacunación de aquel día y se inició un protocolo de seguridad.
El responsable sanitario añadió que el efecto de la negligencia para la salud de los niños “es nulo”, pero que el “fabricante no puede asegurar al cien por cien la producción de defensas” al haber disuelto la vacuna con agua.
Por este motivo, una vez dejado un período prudencial para la producción de anticuerpos, este sábado, día 29, se harán análisis de sangre a los niños para saber si los tienen que volver a vacunar y es por este motivo que la Sanidad cántabra hizo público el error este viernes.
España comenzó el pasado 15 de diciembre su campaña de vacunación infantil contra el covid-19 para 3,3 millones de niños de entre 5 y 11 años.
En la actualidad, según los últimos datos del Ministerio de Sanidad español, un 54,1 por ciento de los niños comprendidos entre esas edades tienen al menos una dosis de la vacuna.