En un intento para cobrar la pensión de su tío, un sujeto llevó el cadáver de su familiar hasta la oficina de correos en Irlanda; sin embargo, al entrar al inmueble descubrió que el hombre estaba muerto; el sobrino dijo a la policía que no se había dado cuenta de su condición, por lo cual ya es investigado.
De acuerdo con Infoabe, Peadar Doyle, de 66 años, falleció el viernes minutos antes de que su sobrino Declan Haughney y otro hombre lo llevaran a la oficina de correos de Hosey en Carlow, Irlanda, para cobrar su pensión.
Por su parte, Declan, de 40 años, argumenta que él y su acompañante no se dieron cuenta de que su tío estaba muerto, pues hacía cinco minutos antes de llegar a la oficina de correos estaba vivo y caminaba por sí mismo, aunque con ayuda de ambos.
Declan declaró a la policía que él, junto con otro hombre, recogieron a su tío debajo del puente de Pollerton Road, ubicado a menos de dos minutos a pie de la casa que compartía con su familiar. Lo llevaron a la oficina de correos tomándolo del brazo, hasta entonces su tío “caminaba normalmente y luego creo que murió”.
De un momento a otro comenzó a “arrastrar los talones” y empezó a dejarse caer; sin embargo, no pensaron que fuera grave. “No pensamos en eso porque Peadar había tenido ataques al corazón y todo eso”, dijo el sobrino del finado a los medios británicos.
Al llegar a la oficina de correos, Declan explicó que su tío “se tiró” al suelo y fue allí que se dio cuenta de que estaba muerto. “Llegamos hasta la cola. Lo sosteníamos y cuando llegamos a la fila lo soltamos y simplemente se cayó. Simplemente cayó allí”.
Por estos hechos la policía lleva a cabo una investigación para determinar la causa de muerte de Peadar Doyle y resolver las acusaciones por fraude de su sobrino, quien tiene antecedentes penales por haberle robado a su tía hace 15 años, por lo cual tuvo que pasar dos años en prisión. También es señalado como adicto a las drogas.
Sus vecinos lo acusan por la muerte de su tío, incluso afirma que ha sido agredido. No obstante, asegura que es inocente. “No soy un imbécil para entrar en Hoseys con un hombre muerto y cobrar su dinero. ¿Estoy loco? No lo estoy”, dijo.