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Una ligera sonrisa se dibuja en el rostro de Víctor Manuel Velázquez, presidente del Consejo de Administración de la Cooperativa La Cruz Azul. El reportero le pregunta por el orgullo que siente de la marca que ahora dirige, y su respuesta es contundente: es una gran responsabilidad porque es necesario que la sociedad cooperativa más grande de Latinoamérica tenga una refundación.
Imagen Poblana entrevista en el interior de su oficina al ingeniero que fue votado por los socios de este grupo empresarial. La línea narrativa de la plática es el rumbo que tomará este corporativo ante la diversificación de sus productos, que van de las cementeras, el deporte y hasta hoteles, en un escenario multinacional.
Manuel Velázquez lo señala con claridad y sin aspavientos: el barco debe mejorar su ruta a través de los valores y principios que le fundaron. La Cooperativa La Cruz Azul, detalla, ha sido dañada en la última década por una mala administración. “Hubo compañeros que se desviaron del camino, y ahora es necesario recomponer a la Cruz Azul”.
Víctor Manuel Velázquez afirma que la empresa se fundó con valores específicos, no solo de orden empresarial, sino también sociales. Por ello, para mejorar la imagen, proyectar a la empresa en un escenario internacional e impulsar su diversificación es necesario retomar los principios, valores y el trabajo que generaron el crecimiento de la cooperativa.
Este crecimiento va de la mano de la transparencia de las finanzas de este ente privado y la democratización de sus procesos ante los socios. Reporta el directivo que diversos despachos jurídico-contables han sido contratados justamente para dar certidumbre sobre el ejercicio de los recursos de este gran corporativo.
El presidente del Consejo de Administración apunta uno de los conceptos más vanguardistas en el desarrollo de mercado: la Economía Social. Una cooperativa tiene que desarrollar este tipo de economía para poder cumplir con su vocación de fundación. Donde la cementera, por ejemplo, ha establecido sus fábricas, genera un desarrollo perimetral con la creación de escuelas, programas deportivos y la intervención de espacios públicos.
La Cruz Azul es un corporativo que abarca, además de las cuatro plantas cementeras, a más de 16 empresas todas ellas administradas por un consejo. Por el tamaño de las operaciones, número de empleados y alcances, el grupo es la cooperativa más grande de Latinoamérica y está lista para una expansión internacional en sus distintos servicios y productos, adelanta Velázquez.
La marca tiene un posicionamiento positivo entre los mexicanos y es orgullo para el país, destaca el presidente del Consejo de Administración, y debido a ello se construye cada día más frente a organismos como el Consejo Nacional Supervisor de Cooperativas.
En materia deportiva, Víctor Manuel Velázquez es exigente consigo mismo y con el equipo de futbol. Celebra que hayan sido campeones en el pasado torneo, pero lamenta y exige mayores resultados tras no haber sido eliminados en el Grita México Apertura 2021.
El Cruz Azul fue casi perfecto en la Liga MX pasada. Líderes a la ofensiva, a la defensiva, líderes generales. Tras derrotar al Santos, y con el nuevo Consejo de Administración, la máquina terminó con 23 años de sequía.
Por eso, Víctor Manuel apunta que la Cruz Azul seguirá promoviendo mayores resultados y confiando en los jóvenes. “Estamos trabajando mucho con las fuerzas básicas, en particular con la Sub 20 terminamos siendo subcampeones”.
Haciendo un recuento del desarrollo en los últimos meses del grupo La Cruz Azul, Víctor Manuel Velázquez reitera el papel de responsabilidad social que tienen los socios con el desarrollo de México.
“Es una gran responsabilidad porque es una cooperativa emblemática, es un ícono a nivel nacional e internacional. Sí es una gran responsabilidad porque todos los proyectos y todo lo que hemos emprendido se hace de la mano con los 700 cooperativistas. Y como siempre les he dicho: no les vamos a fallar y vamos a seguir trabajando por una mejor cooperativa, una mejor Cruz Azul y un mejor México”.
