No sé usted, amable lector, pero desde mi particular punto de vista la obligación principal de un diputado, sea local o federal, es estar precisamente atendiendo temas legislativos a favor de la sociedad.
Si me equivoco, por favor que alguien me lo diga.
Y esto viene a colación de algo que ha llamado la atención de este columnista en esta semana, pues algunos diputados locales del PAN parecen más empleados de Genoveva Huerta Villegas, que legisladores.
Son dos los nombres que salen a la vista: Oswaldo Jiménez y Mónica Rodríguez Della Vecchia, diputados panistas que lucen más interesados en conservar a su jefa Genoveva como dirigente estatal del PAN que en su trabajo legislativo.
Tampoco podemos decir que Jiménez y Della Vecchia sean los diputados mejor calificados del Congreso, sobre todo porque se pasaron tres años sin pena ni gloria e increíblemente repiten para esta nueva legislatura.
En poco más de un mes que lleva de trabajo el presente Congreso de Puebla, Oswaldo Jiménez y Mónica Rodríguez han estado más activos haciéndole el “caldo gordo” a Huerta Villegas que en su trabajo legislativo.
Y no digo para nada que no tengan derecho, no interpreten a su modo las cosas como acostumbran, estimados diputados, lo que es lamentable es que los poblanos esperen más de ustedes y que la prioridad sea mantener a Huerta Villegas como dirigente del PAN.
No, sinceramente no se espera mucho de estos diputados en la presente legislatura, pero por respeto para todas esas personas que votaron por ellos, muchos de ellos sin afinidad política hacia el PAN, deberían pasar más tiempo en su curul que lanzando mensajes a favor de Genoveva en redes sociales.
Estamos a poco más de 15 días de que se lleven a cabo las elecciones internas en el PAN, por lo que la sociedad debe dar por perdidos estos días en cuanto a trabajo legislativo por parte de Jiménez y Rodríguez Della Vecchia.
A ver si esto no se repite durante los tres años de legislatura.