
El pasado mes de junio, la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) hizo una declaratoria general de inconstitucionalidad sobre el artículo de la Ley General de Salud que prohíbe el consumo lúdico de la marihuana.
La Corte declaró con efectos generales la inconstitucionalidad de la prohibición absoluta al uso lúdico y recreativo de la #Marihuana.
— Suprema Corte (@SCJN) June 29, 2021
Conoce más sobre esta resolución que consolida el derecho al libre desarrollo de la personalidad ⬇️ pic.twitter.com/7fqgYA8hsb
Con 8 votos a favor y 3 en contra, el pleno de la Cámara Alta dio un paso importante a la despenalización total de esta hierba, lo que fue calificado como un hecho histórico para las libertades.
En diversas partes del país se llevaron a cabo manifestaciones para permitir el uso libre de la marihuana, como ya estableció la SCJN, argumentando los beneficios “curativos” que puede tener esta hierba, considerada como una droga ilegal.
No obstante, en Puebla esta lucha por la legalización de la marihuana se ha convertido en una muestra de activismo infructífero, gracias al grupo denominado “Toque Poblano”, que se mantiene desde hace meses en un plantón frente a la Fiscalía General del Estado (FGE).
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— Imagen Poblana (@imagenpoblana) September 25, 2021
Aficionados a la cannabis, del colectivo Toque Poblano, exigen afuera del Congreso del Estado una ley para el consumo de marihuana.
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En uno de los camellones del bulevar 5 de Mayo podemos encontrar a un grupo de jóvenes que sin hacer nada más se mantienen sentados consumiendo la hierba e incluso sembrándola en este camellón, acción que resulta criticable.
Y es que en lugar de crear una comisión que acuda al Congreso de Puebla, este grupo de jóvenes ha decidido que lo mejor para su “lucha” es hacer absolutamente nada, reforzando la imagen peyorativa que se tiene de los consumidores de marihuana.
Con cigarro en mano, ropa sucia o en malas condiciones y sin argumentos sólidos más que el gusto de fumar un “porro”, estos jóvenes intentan que por arte de magia las autoridades den entrada abierta al consumo de marihuana.
Aunque en un principio fueron apoyados por personas que pasan por la zona, hoy son considerados un problema, pues la imagen que proyectan no es la que se busca por parte de los verdaderos defensores del uso de la marihuana.
Las autoridades han determinado no moverlos de ese lugar debido a que se puede tomar como un acto de represión a este grupo, lo que también podría ser denunciado como una acción de discriminación.
Lo cierto es que la lucha que se lleva a cabo para despenalizar la marihuana pierde total validez con este grupo de jóvenes sin oficio ni beneficio, que solo parecen querer descansar mientras fuman un poco de hierba.