Hoy vence el plazo para que la empresa inmobiliaria china Evergrande liquide un adeudo cercano a 100 millones de dólares. Desde la semana pasada ha habido rumores de que incumplirá porque no tiene liquidez. Esto ya afectó a las bolsas de valores del mundo y la cotización de monedas de economías emergentes. El mayor temor es que se repita la crisis de 2008. ¿Qué tan probable es?
El 15 de septiembre de 2008, la empresa financiera Lehman Brother se declaró en quiebra. Era el costo de haber jugado con hipotecas de alto riesgo. Otorgó préstamos a personas con baja solvencia, pero que estaban dispuestos a pagar altas tasas de interés en un mercado inmobiliario donde crecían exponencialmente sus precios. En 2007 la economía se enfrió y la burbuja financiera se reventó; los precios de los inmuebles cayeron y los deudores abandonaron sus viviendas, pues el precio real estuvo por debajo de la deuda. Lehman Brother se quiso retirar y buscó deshacerse de la deuda, pero ya era demasiado tarde. La empresa suspendió el otorgamiento de hipotecas, pero con ello cortó el flujo de circulación de capital lo que la terminó ahogando. Las consecuencias ya las conocemos: la mayor crisis financiera de la historia del capitalismo.
En estos momentos, Evergrande pasa por una crisis de liquidez, es decir, tiene activos, pero no en efectivo por lo que no podrá pagar los compromisos financieros de hoy. El modelo de la inmobiliaria es muy parecido al de cualquier otra: realiza preventa de desarrollos habitacionales y con ese dinero financia la construcción, la otra parte es financiada por proveedores que otorgan créditos para los materiales. Cuando la empresa entrega las viviendas liquida sus deudas y continúa con otros desarrollos.
Desde el año pasado el gobierno chino observó con preocupación una creciente especulación inmobiliaria basada en este modelo de negocio. De forma particular, por el crecimiento exorbitante de deuda de empresas privadas como Evergrande, restringió la venta de inmuebles hasta que estén terminados; bajo esta norma, no puede seguir obteniendo dinero por preventa, pero debe pagar las deudas que ya ha adquirido, por lo que se ha visto forzada a renegociar los plazos.
El temor a que Evergrande incumpla sus compromisos han desatado caídas drásticas en los mercados financieros. Muchos inversionistas están retirando su dinero ante un posible colapso y buscan refugio en activos más seguros, por eso es que monedas como el peso mexicano también han caído. La preocupación es que la insolvencia ahogue a la empresa y la lleve a la quiebra, muchos perderían millones de dólares (la deuda de la empresa equivale al 2% del PIB chino); también el flujo comercial se detendría, Latinoamérica es un gran proveedor de materiales para construcción de Evergrande.
Algunos economistas confían en que el gobierno chino intervendrá a la empresa y evitará la quiebra. Otros economistas señalamos que el gobierno no salvará a Evergrande. Dentro de este grupo hay pesimistas que anuncian una nueva crisis porque comparan la caída de Evergrande con la de Lehman Brother. Pero también estamos quienes suponemos que eso no se repetirá, ¿Por qué?:
- Comparativamente la deuda de Evergrande es menor a la de Lehman Brother. Proporcionalmente es la mitad, por lo que el arrastre económico sería diferente.
- Lehman Brother tenía activos financieros, Evergrande tiene activos en bienes raíces. Es decir, la financiera de Estados Unidos tenía “papeles” que esfumaron su valor, la inmobiliaria china tiene inmuebles reales con valores reales.
- En 2008 Lehman Brother fue una pieza importante pero no la única; el mercado de hipotecas de riesgo estaba contagiado por el impago provocado por la especulación de una burbuja financiera. El mercado chino no está pasando por esa situación, precisamente las normas del gobierno tienden a evitar la formación de burbujas especulativas.
- El gobierno chino ha calculado muy bien sus riesgos. El caso de Evergrande podría entenderse mejor bajo la metáfora de una “purga”. La quiebra de esta empresa podría ser benéfica para el gobierno que ha criticado estos modelos de negocio. Hasta ahora las mayores pérdidas de Evergrande están en la Bolsa de Valores de Hong Kong que representa el nivel más odioso del capitalismo, por lo que no es extraño que el gobierno chino no tenga ningún interés en rescatarla.
- La población no quedará desprotegida. A diferencia del salvajismo de la economía gringa, ante una eventual quiebra de Evergrande, hay procesos muy ordenados y de interés público para que los ciudadanos que pagaron anticipadamente sus viviendas no se vean afectados. Con ello se cortaría de inmediato un posible contagio hacia otros sectores de la economía.
Los mercados financieros podrían asumir rápidamente el caso de Evergrande como purga y aceptar la desaparición de una empresa que actuó de forma equivocada siempre que se garantice que no se traspasarán los efectos. Esta hipótesis parece cumplirse si se observan los movimientos de la Bolsa de Valores de Nueva York. Si bien tuvo una caída por estos sucesos, el movimiento no fue diferente a los vaivenes que presenta desde marzo de este año y que le han impedido rebasar los 16 mil puntos como se muestra en la gráfica siguiente.
Elaboración propia con datos de NYSE Composite
Incluso, hoy jueves los mercados financieros y de divisas han sido más optimistas, están marcando ganancias en la apertura, por lo que decimos que es poco probable una crisis como la de 2008 que ahora provenga de China. Así que, tranquilidad y a disfrutar el inicio del otoño.
*Profesor-Investigador Universidad de Quintana Roo
Miembro del Sistema Nacional de Investigadores
Twitter: @BandalaCarlos