
Menos del 30 % del total de alumnos poblanos regresó este lunes a clases presenciales, por lo que los salones se pudieron ver casi desérticos, mostrando que los padres de familia prefieren mantener a sus hijos en clases virtuales.
Además del riesgo de contagio de COVID-19, la mala economía de las familias poblanas se coloca como otro de los obstáculos que ha impedido que los niños regresen a las aulas, pues para los paterfamilias es complicado comprar todos los útiles escolares y artículos de protección para sus hijos.