Luego del fracaso que resultó la consulta popular para llevar a juicio a expresidentes de México, las huestes de la llamada “Cuarta Transformación” se han lanzado contra el Instituto Nacional Electoral (INE), culpando a este organismo de la baja participación ciudadana.
Desde el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, hasta liderazgos y simpatizantes de izquierda, han asegurado que el INE llevó a cabo un boicot contra este ejercicio al supuestamente no promocionar lo suficiente esta consulta.