Una neonata de la ciudad israelí de Asdod sorprendió a todo el equipo médico que atendió el parto, ya que las dimensiones del estómago de la pequeña eran enormes y la zona parecía severamente inflada. Tras practicarle varios estudios, los galenos descubrieron que la bebé había “nacido embarazada” y tenía un feto sin vida en su interior, una rara condición conocida como “fetus in fetu”.
De acuerdo con Omer Globus, el médico que atendió el parto, cuando la madre parió a la bebé de inmediato notaron que el un estómago de la neonata era muy grande, por lo cual le practicaron una serie de pruebas clínicas para determinar el motivo de tal condición.
Los galenos quedaron sorprendidos tras concluir los estudios de imagenología, pues revelaron que la niña había nacido con un feto en su interior parcialmente desarrollado. Así que de inmediato fue ingresada al quirófano para extirpárselo; la operación fue exitosa y la recién nacida fue dada de alta. "Tenemos la impresión que originalmente había dos bebés y lo estamos comprobando", detalló el médico principal.
El especialista afirma que esta rara condición ocurre en uno de cada 500,000 nacimientos y puede producirse durante un embarazo gemelar cuando, en algún punto de la gestación, uno de los fetos se incorpora al otro por alguna razón aún no descubierta por la ciencia.
Sin embargo, otros especialistas creen que podría tratarse de un tumor benigno en "el que intervienen tejidos de varias partes del cuerpo". Según Globus, señaló que estos casos no siempre son detectados de inmediato y han reportado que personas adultas, al practicarse estudios relacionados con otros padecimientos, descubren que tienen un feto en su interior.