Un padre de familia fue denunciado por su hijo de 14 años luego de castigarlo quitándole el celular por una semana y obligarlo a hacer tareas domésticas; el joven, enfurecido, escapó de su casa hacia la estación de policía y acusó a su progenitor por "trabajo infantil ilegal"; la denuncia fue desestimada. Los hechos sucedieron en China.
De acuerdo con medios locales, un padre y su hijo, residentes en Ma'anshan, en la provincia china de Anhui, se vieron enfrentados por un smartphone. Ya que el hombre estaba muy enfadado con su hijo porque nunca dejaba el teléfono y descuidaba sus estudios. Por ello, la semana pasada decidió lo castigó quitándole el celular y lo obligó a hacer tareas domésticas.
Sin embargo, el adolescente se rehusó a obedecer a su padre y escapó de su casa para denunciar “los malos tratos que recibía”, así que acudió a la comisaría de Policía a interponer una denuncia por "trabajo infantil ilegal".
Tras relatar los hechos, los agentes decidieron acompañar al chico para encarar al padre. Cuando llegaron al domicilio, el hombre explicó lo sucedido a las autoridades, que desestimaron la denuncia del adolescente, pues las tareas del hogar no suponen "trabajo infantil", según las leyes del país.
Entonces la Policía local pidió al padre que disciplinara a su hijo, pues la denuncia era grave y podría haber terminado en prisión. Además, debido a su adicción, opinaron que quitarle el teléfono durante un largo periodo de tiempo podía ser una buena opción. Sin embargo, el chico respondió: "¿De verdad crees que solo tengo un móvil? Qué ingenuo".
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