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Tras más de 20 años en prisión acusado de asesinar a una pareja, un estadounidense de 59 años por fin fue liberado al demostrar su inocencia gracias a una nueva evidencia de material genético encontrada en la escena del crimen. Los hechos sucedieron en Georgia, Estados Unidos.
De acuerdo con medios locales, el 11 de marzo de 1985 un hombre blanco ingresó a una iglesia baptista en el condado de Camden (Georgia, EU) y atacó a tiros Harold y Thelma Swain, un matrimonio afroamericano.
Luego de 15 años, la Policía halló evidencias que vinculaban con el caso a Dennis Perry, un vecino del estado de Georgia que fue brevemente considerado sospechoso en 1988 tras una denuncia anónima y luego descartado por los investigadores iniciales.
En 2003 fue llevado a juicio y la madre de una antigua pareja de Perry afirmó que días antes del crimen el presunto asesino le había confesado que quería matar a Harold Swain, pues le había pedido dinero prestado y solo recibió burlas.
Perry fue procesado y encontrado culpable; sin embargo, renunció a la posibilidad de apelación a cambio de cumplir dos cadenas perpetuas y aceptó los cargos. Aunque posteriormente insistió en su inocencia, ya que temía que fuera condenado a pena de muerte.
Fue hasta 2019 cuando una investigación periodística encontró una nueva evidencia entre el material genético hallado en la escena del crimen y Erik Sparre, otro sospechoso que había sido descartado del caso a raíz de una coartada dudosa que no fue corroborada de manera apropiada.
Por ello, en julio de 2020, un juez revisó la nueva evidencia y aprobó un nuevo juicio para Perry, esta vez fue hallado inocente y salió de prisión. Además, el 19 de julio el fiscal del distrito de Brunswick, Keith Higgins, decidió retirar todos los cargos contra el acusado y fue exonerado.
No obstante, la investigación del caso continúa abierta, y hasta el momento no hay trascendidos sobre un nuevo imputado.
