
Luego de lo que se ha visto en la vacunación contra el COVID-19 de adultos mayores, resulta fundamental que la recién iniciada inoculación de maestros tenga máxima transparencia, a fin de evitar que algunos abusivos se queden con vacunas destinadas a verdaderos trabajadores de la educación.
En la campaña de vacunación para adultos mayores fueron evidentes los actos irregulares donde vivales se disfrazaron de ancianos y de otros que falsificaron documentos para recibir la vacuna, algo que puede presentarse en mayor medida con la inoculación de maestros.