
La pandemia de COVID-19 ha dejado daños en muchos aspectos de la vida humana, incluyendo el arte. El encierro y las nuevas tecnologías han provocado que la llamada Generación “Z”, correspondiente a la población de 14 a 24 años, ya no se interese en visitar los cines.
Si bien es cierto que las salas de cine se mantuvieron cerradas por mucho tiempo por la crisis sanitaria, también es una realidad que a la nueva generación le parece ya un tanto aburrido acudir a uno de estos complejos a disfrutar de una película.