"Avergonzada" por su embarazo, una mujer de 24 años prendió fuego y mató a su bebé recién nacido ayer en Anápolis, Brasil. El crimen se descubrió cuando un ciudadano vio a un perro arrastrar el cuerpo carbonizado por una calle del Bairro Cerejeiras.
De acuerdo con el Grupo de Investigaciones de Homicidios, "según ella, la madre está muy enferma y hasta moriría si supiera, estaba muy avergonzada de haber sido descubierta, no quería al bebé y quería deshacerse de él".
La policía lleva a cabo las indagatorias correspondientes, aunque todavía no se ha podido confirmar las afirmaciones que emitió la acusada, ni los problemas de salud que se supone tiene la madre.
Tras el hallazgo del cuerpo carbonizado la madre fue identificada debido a que el bebé aún portaba la pulsera del hospital. Además, las cámaras de seguridad grabaron el momento cuando la mujer sale de su coche con una caja de cartón que contendría al pequeño, y posteriormente la quema utilizando alcohol.
Al respecto, el padre, que también será investigado, afirmó que tras conocer la noticia del embarazo decidieron abortar. Sin embargo, ella no lo llevó a cabo, y para ocultar su gravidez utilizó fajas.
