Un joven evitó que una mujer se precipitara desde un segundo piso en Calahorra (La Rioja). Sin pensárselo dos veces, escaló por las terrazas del edificio hasta llegar a la rescatada, a la que tranquilizó. Se encontraba sola en la vivienda y padece algún tipo de trastorno mental.
Calahorra tiene un nuevo héroe. Su nombre es Camilo Medina. Tiene 24 años y es estudiante de psicología. Un joven que evitó que una anciana se precipitara al vacío desde el balcón de un bloque de viviendas de la localidad riojana.
Eras las 17:00 cuando los gritos alertaron a Camilo. Se encontraba en el locutorio que regentan sus padres en la calle Padre Lucas. Salió fuera del establecimiento y contempló el panorama. Un par de pisos por encima, una mujer de 80 años se había quedado encaramada a la barandilla de su balcón. Tenía medio cuerpo fuera y peligraba con caer al vacío.
Los propietarios de un bar cercano retiraron la terraza de la calle y el padre de Camilo colocó su furgoneta justo debajo del balcón donde se encontraba la mujer. Así, en caso de caída, el golpe sería menor. Pero, no era suficiente. Motivo por el que el joven decidió actuar.
Mediante una escalera, Camilo subió al primer piso y desde allí trepó hasta el segundo, donde se hallaba la mujer de avanzada edad. Una vez arriba, la apartó del abismo. El joven la llevó al interior de la vivienda y cerró las cortinas. Allí dentro intentó tranquilizarla mediante ejercicios de respiración. Prácticamente no pudo mantener una conversación con ella ya que era de origen rumano y no entendía el idioma. Una persona que además padecía algún tipo de trastorno mental.
La mujer se encontraba sola en la vivienda, en la que vive junto a una hija, el marido de esta y una nieta. Tras el suceso, la Policía intentó entrar en el domicilio, pero le fue imposible, porque la cerradura estaba cerrada por fuera y Camilo no descubrió ningún juego de llaves que poder usar. Al final, los agentes avisaron a un familiar que trabajaba en un bar cercano y en 20 minutos apareció el yerno. Abierta la puerta, la mujer pudo ser trasladada al hospital.
Una actuación que le ha valido el reconocimiento de todos los vecinos del barrio. Por supuesto, también de la familia de la rescatada. No todos los héroes vuelan. Algunos trepan.