Debido a la difícil tarea de advertir el impacto de un asteroide de gran tamaño contra la Tierra, esta semana las instituciones de varios países participan en un simulacro en el que se plantea un escenario de tal magnitud y los trabajos para enfrentar esta amenaza que podría acabar con la vida en nuestro planeta.
El ejercicio de esta simulación se planteó durante la Conferencia de Defensa Planetaria, que se celebra en Viena (Austria), y el objetivo es averiguar si las tecnologías, sistemas e instituciones actuales podrían hacer frente a la crisis de un asteroide real que amenazara la vida planetaria. En la simulación participan agencias como la NASA y la ESA.
Para llevar a cabo este simulacro se ha planteado que la amenaza será el asteroide denominado 2021 PDC, descubierto el pasado 19 de abril por astrónomos en Hawái. El cuerpo celeste está a 57 millones de kilómetros de distancia, y su aproximación más cercana a la Tierra ocurrirá el 20 de octubre de 2021. Al principio la probabilidad de impacto fue baja; pero con el paso del tiempo ha registrado un aumento.
It's day 3 of the #PlanetaryDefense Conference, and there are new – not-so-positive – developments playing out in the #FictionalImpact scenario!#2021PDC☄️ pic.twitter.com/upnJ0M9cZ9
— ESA Operations (@esaoperations) April 28, 2021
A poco más de seis meses del hipotético impacto, los especialistas pensaron en formas de resolver el problema; pero llegaron a la conclusión de que el tiempo para actuar era demasiado corto. Ahora, plantean que hay que prestar especial importancia a los sistemas de detección temprana.
Al respecto, Lindley Johnson, oficial de Defensa Planetaria de la NASA, dijo: "Cada vez que participamos en un ejercicio de esta naturaleza, aprendemos más sobre quiénes son los actores claves en un evento de desastre, quién necesita saber qué información y cuándo".
Este simulacro también pretende impulsar la esperada misión de Redireccionamiento de Doble Asteroide (DART, por sus siglas en inglés), programada para 2022, la cual se propone ser la primera demostración real de una tecnología de desviación de asteroides.