Justicia animal: cazador furtivo muere pisoteado por una manada de elefantes

Justicia animal: cazador furtivo muere pisoteado por una manada de elefantes

Foto: Pixabay

Un presunto cazador furtivo que escapaba de los guardabosques del Parque Nacional Kruger en Sudáfrica murió bajo las patas de una manada de elefantes, que al encontrarse con ellos le pasaron encima a pisotones.

 

De acuerdo con la agencia EFE, los hechos acaecieron el pasado sábado en el citado parque, cuando el ahora fallecido y sus cómplices huían de los guardabosques y fueron embestidos por los paquidermos, confirmó hoy el portavoz de la reserva natural, Isaac Phaahla.

 

Por medio de un comunicado, autoridades de Parques Nacionales Sudafricanos (SANParks), organismo que gestiona esos espacios, informó: “Cuando se dieron cuenta de que habían sido vistos, los presuntos cazadores furtivos arrojaron un hacha y una bolsa con sus provisiones en un intento de escapar de los guardabosques”.

 

Por su parte, el Parque Nacional Kruguer informó a través de su cuenta de Twitter que tras el accidente los guardabosques descubrieron a uno de los cazadores “gravemente pisoteado y lamentablemente sucumbió a sus heridas”; además, un tercer sospechoso resultó herido en el ojo, pero siguió huyendo.

 

Asimismo, se sabe que uno de los cazadores escapó; pero “el domingo detuvimos a otros tres sospechosos con un rifle, municiones y un hacha. Todavía no se han establecido sus nacionalidades. Se hará tan pronto como comparezcan ante el tribunal”, confirmó este lunes Phaahla.

 

En este sentido, Gareth Coleman, director del Parque Nacional Kruger, dijo que “la campaña contra la caza furtiva es responsabilidad de todos”, pues “amenaza muchos medios de vida, destruye familias y atrae recursos muy necesarios para combatir el crimen que podrían usarse para crear empleos y desarrollo”.

 

Este no es el primer incidente, ya que en abril de 2019 un presunto cazador furtivo de rinocerontes fue pisoteado por un elefante y luego fue devorado por una manada de leones en el mismo parque.

 

No obstante, los cazadores furtivos no se rinden e intentan matar, entre otros animales, a los rinocerontes para quitarles sus cuernos, que se venden a elevados precios en los mercados asiáticos, pues se les atribuyen propiedades curativas y afrodisíacas.

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