El consumo excesivo de bebidas energizantes puede estar detrás de los graves problemas cardíacos sufridos por un joven de solamente 21 años, revela un informe médico del caso.
El hombre acudió a un hospital londinense en búsqueda de ayuda médica después de experimentar dificultad para respirar, un cuadro que se volvió progresivamente peor a lo largo de cuatro meses. El paciente también se quejó de pérdida de peso.
De acuerdo con el informe de su caso, publicado en la revista BMJ Case Reports, el joven alegó haber consumido diariamente cuatro latas de 500 mililitros de bebidas energéticas durante aproximadamente dos años.
Dos litros de esta bebida implican un consumo de 640 miligramos de cafeína. Para comparar, en promedio, una taza de café contiene aproximadamente 90 mg de cafeína, detalló Live Science.
El paciente compartió, además, que ocasionalmente sentía indigestión, temblores y latidos cardíacos acelerados, pero que no había buscado atención médica. Agregó que se sentía tan mal y letárgico en los últimos meses que se vio obligado a abandonar temporalmente sus estudios universitarios.
Después de una serie de exámenes, le diagnosticaron dos afecciones potencialmente mortales: insuficiencia cardíaca e insuficiencia renal. En este caso, las dos condiciones parecían no estar relacionadas, pero cada una tuvo efectos graves en el organismo del paciente. Sus médicos incluso discutieron si el joven necesitaría un trasplante doble de órgano (corazón y riñón).
Si bien la insuficiencia renal se debió a una afección antigua pero no diagnosticada previamente, la explicación más probable de su insuficiencia cardíaca fue su alto y prolongado consumo de bebidas energéticas, consideran los especialistas involucrados en el caso.
Después de cerca de dos meses de internación hospitalaria, el hombre fue dado de alta con la prescripción de varios medicamentos para el corazón. Según el informe, el joven dejó de tomar bebidas energizantes y su función cardíaca mejoró tanto que ya no necesita un trasplante de corazón en este momento.
"Se deben proporcionar advertencias claras sobre los peligros cardiovasculares potenciales del consumo de bebidas energéticas en grandes cantidades", subrayan en el informe.
De acuerdo con los autores del estudio, es posible que, debido a factores biológicos subyacentes, algunas personas están predispuestas a presentar problemas cardíacos a raíz del consumo de las bebidas energéticas. Sin embargo, se necesita más investigación para determinar cuáles son estos factores.