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La Real Federación Española de Futbol (RFEF) decidió finalmente que la final de la Copa del Rey del próximo 3 de abril entre la Real Sociedad y el Athletic de Bilbao se dispute sin público.
"Se ha valorado especialmente el hecho de que las aficiones no puedan desplazarse y acudir al estadio de la Cartuja, acordando la Consejería de Salud y Familias de la Junta de Andalucía y la Real Federación Española de Futbol, que dicho partido se desarrolle sin la asistencia de público en las gradas", dijo la RFEF en un comunicado.
En la jornada del 17 de marzo, distintos medios españoles habían informado de la vuelta del público a los estadios para esa fecha, citando fuentes de la Federación, lo que creó una gran expectativa entre ambas aficiones.
La final del 3 de abril del llamado torneo del K.O. pertenece a la edición del 2020, aplazada por la pandemia, y los planes adelantados también hacían referencia a la final de la edición de 2021, el 17 de abril, entre FC Barcelona y Athletic de Bilbao, y también en La Cartuja.
La expectación generada se enfrió pocas horas después con las palabras de la ministra de Sanidad, Carolina Darias, en su valoración diaria de la pandemia.
"Seré clara y contundente: no es adecuado, no es oportuno ni conveniente. (...) Entiendan que no es posible", dijo Darias a los periodistas.
La Final de Copa es una cita muy popular entre las distintas aficiones de los clubes del futbol español que aprovechan para desplazarse masivamente cada año a la ciudad donde se dispute ese partido en esa ocasión, generando masivas jornadas festivas y con un amplio colorido en las calles.
De ahí que el comunicado de la RFEF mencione a las aficiones en uno de sus puntos.
"La situación epidémica actual y (...) el cierre perimetral de la movilidad (...) hacen inviable que aficionados no residentes en la provincia puedan acudir a presenciar dicho encuentro", explicaron los dirigentes del futbol español para justificar finalmente su decisión.
Y además también reconocieron que en las últimas semanas, su planteamiento era el de permitir un aforo limitado.
Según explicaron, en las últimas semanas mantuvieron encuentros con las autoridades sanitarias, cuya conclusión inicial era que "la celebración de dicho encuentro con afluencia de público supondría la calificación de riesgo epidémico moderado por COVID-19, lo que permitía la asistencia de un aforo limitado", explicaron.
