Un grupo de arqueólogos israelíes anunció el descubrimiento de decenas de nuevos fragmentos de los llamados Manuscritos del Mar Muerto. Se cree que el documento, cuyos restos se encontraron en una cueva en el desierto, fue escondido allí durante una revuelta judía contra Roma hace casi 1.900 años.
Las piezas de pergamino con textos bíblicos escritos en griego contienen partes de los libros de Zacarías y Nahúm. El estilo de escritura permitió fechar el hallazgo alrededor del siglo I, según la Autoridad de Antigüedades de Israel.
Los Manuscritos del Mar Muerto son una colección de textos judíos encontrados en unas cuevas en el desierto en Cisjordania, cerca de Qumrán, a orillas del mar Muerto, en las décadas de 1940 y 1950. Estos documentos, datados del siglo III a. C. hasta el siglo I d.C., incluyen las primeras copias conocidas de textos y documentos bíblicos que describen las creencias de una secta judía poco conocida.
Los recientes hallazgos son los primeros fragmentos de los Manuscritos del Mar Muerto encontrados en excavaciones arqueológicas en el desierto al sur de Jerusalén en seis décadas. Si bien no se encontraron nuevos textos durante las excavaciones a lo largo de los últimos 60 años, muchos han aparecido en el mercado negro, aparentemente tras haber sido saqueados de las cuevas.
Se cree que los fragmentos encontrados recientemente eran parte de un pergamino que fue escondido en la cueva durante la rebelión de Bar Kojba, un levantamiento judío armado contra Roma durante el reinado del emperador Adriano, entre 132 y 136. Unas monedas acuñadas por rebeldes, así como puntas de flecha, encontradas en otras cuevas en la región también son de ese período.
Los arqueólogos israelíes anunciaron también otros hallazgos encontrados durante la exploración de más de 500 cuevas en el desierto, entre los cuales se encuentra el esqueleto momificado de un niño de 6.000 años de antigüedad, una inmensa canasta tejida del período neolítico, estimada en 10.500 años, y decenas de otros materiales orgánicos delicados conservados debido al clima árido de las cuevas.