La ONG Save The Children denunció este martes que en el norte de Mozambique niños de 11 años de edad son decapitados a causa de un conflicto yihadista; en poco más de tres años 1,300 civiles han sido asesinados.
Con base en datos de la Oficina de la ONU para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA), cerca de 670,000 personas han sido desplazadas y la mayoría ha llegado hasta Pemba, capital de la provincia de Cabo Delgado, en busca de refugio en casas de familiares o de otros miembros de la comunidad.
Por medio de un comunicado, Chance Briggs, director de esta organización en Mozambique, refirió: “Esta violencia debe detenerse y las familias desplazadas deben recibir apoyo para recuperarse del trauma”.
Los pedidos de ayuda se registran por cientos, así como los testimonios de asesinatos: “Intentamos escapar al bosque, pero se llevaron a mi hijo mayor y lo decapitaron. No pudimos hacer nada porque también nos matarían a nosotros”, relató a la ONG una madre de cuatro niños sobre el día en que insurgentes atacaron su pueblo en la provincia de Cabo Delgado, quemaron casas de vecinos y mataron a su hijo de 12 años.
La conflagración yihadista en el norte de Mozambique comenzó en octubre de 2017 con el primer ataque a dos comisarias en Mocimboa da Praia de un grupo apodado por la población local como Al Shabab, vinculado al Estado Islámico (EI).
Los ataques no han cesado desde entonces en esta región estratégica rica en piedras preciosas y gas natural, de cuya extracción participan grandes multinacionales como la italiana ENI o la estadounidense Anadarko.
Asimismo, el pasado 2 de marzo Amnistía Internacional denunció que la inseguridad está asociada a ataques indiscriminados contra civiles, perpetrados por mercenarias sudafricanos y militares mozambiqueños acusados de ejecuciones extrajudiciales, tortura y detenciones arbitrarias de sospechosos yihadistas.
Según lo informado por el Proyecto de Datos sobre Localización y Sucesos de Conflictos Armados (ACLED), al menos 2,614 personas han perdido la vida en este conflicto, entre ellas 1,312 civiles.