Un grupo de surfistas encontró un zapato con el pie cercenado de una mujer cerca de una playa en Nueva Gales del Sur. Tras llevar a cabo las indagatorias correspondientes se descubrió que pertenecía a Melissa Caddick, una empresaria australiana acusada de fraude, estafa y malversación de inversiones, desaparecida el pasado noviembre de su casa en Dover Heights, al este de Sídney, a unos 400 kilómetros de donde fueron hallados los restos, según lo informado por RT.
En la zona se han hallado más restos humanos, sin embargo, hasta el momento no se han localizado más evidencias vinculadas a la desaparición y probable muerte de Caddick, de 49 años, que plantean algunos criminólogos, según medios locales.
Sin embargo, la Policía no descarta otros escenarios. como que el hallazgo de la extremidad sea parte de un plan de Caddick para escapar de la justicia. "Siempre existe la posibilidad de que se haya cortado el pie y siga viva, aunque es bastante fantasioso", afirmó en entrevista radial el comisionado de Policía de Nueva Gales del Sur, Mick Fuller.
Fraudster Melissa Caddick’s father-in-law believes she could still alive despite the grisly discovery of a washed-up Asics trainer containing her foot, asking, ‘How much of it was in the shoe?’ https://t.co/vDeXPmtLAF
— The Daily Telegraph (@dailytelegraph) March 9, 2021
El estado en que fue hallado el zapato suscita el debate, ya que muchos expertos argumentan que presenta demasiado buen estado como para haber estado en el agua o a la intemperie por tres meses. "Un posible escenario es que haya sido asesinada recientemente o asesinada y mantenida en el hielo durante un tiempo", opinó el especialista en psicología criminal Tim Watson-Munro.
El pasado 11 de noviembre la Policía y un organismo de control corporativo allanaron la casa de Caddick, situada en un exclusivo sector de Sídney. Horas después, hacia las 5:30 del día siguiente, la mujer salió de la residencia, supuestamente a correr, y nunca más volvió a ser vista. No llevaba su teléfono ni demás pertenecías personales. Es sospechosa del robo de cerca de 20 millones de dólares a través de una fraudulenta empresa de inversión.
La Policía ha informado que la investigación continuará sin importar si se confirma o no la muerte de Melissa. "Tenemos 68 víctimas de fraude y sentimos pena por ellas. Todavía estamos tratando de recuperar fondos y esa investigación continúa. No hemos cerrado este caso", recalcó el comisionado Fuller.