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La revocación que hizo el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación de manera parcial de la convocatoria del proceso interno de Morena en Puebla por falta de transparencia en las encuestas podría favorecer a los candidatos de mejor posicionamiento en el estado.
Me explico.
Originalmente, las designaciones opacas que podían hacer los líderes de Morena pretextando una encuesta encontraban validez justo en la opacidad del procedimiento.
Solo se les informaba que habían perdido el proceso, pero no se sabía quién encuestó, qué metodología siguió o cuando la “empresa” demoscópica hizo la investigación.
Pero la resolución del Tribunal ahora causa un impacto en esta estrategia de opacidad.
Si un aspirante encuentra que la encuesta no tiene sentido o si incluso cree que esta no se aplicó, puede inconformarse legalmente y solicitar la publicación de la empresa además de la metodología de la medición.
Y entonces el partido tendrá que declarar respecto a ello.
Acá aparecen dos posibilidades: o Morena contrata empresas “patito” que presten su depreciada marca para validar las encuestas que en realidad son designaciones, o se contratan encuestadoras reales que -es poco probable- comprometerían su prestigio para favorecer a tal o cual rival.
En distintas mediciones, al interior de Morena, Gabriel Biestro aparece siempre arriba de Claudia Rivera.
La designación de la alcaldesa como la candidata del partido marrón caería en este supuesto y, seguramente, Biestro se inconformaría.
Con la resolución del Tribunal, a la queja del diputado vendría la respuesta obligatoria del partido que revelaría si usó una encuesta real o falsa para justificar el nombramiento.
Y entonces su queja podría invalidar el proceso interno de Morena.
La resolución del máximo tribunal del país en materia electoral favorece a los candidatos de mejor posicionamiento real.
Si los líderes locales de Morena insisten en encuestadoras patito o falsas, el TEPJF les corregirá la plana.
Ya hay antecedentes de ello.
Por eso ahora o encuestan bien o encuestan bien.
