El Gobierno federal y las autoridades regionales de Alemania acordaron endurecer las restricciones por la pandemia de coronavirus y extender el confinamiento hasta el 31 de enero, anunció este martes la canciller Angela Merkel.
"Queremos prorrogar las decisiones que tomamos en diciembre, hasta el 31 de enero, y en algunos aspectos las tenemos que endurecer", dijo Merkel tras una reunión con los jefes de los gobiernos regionales.
La canciller argumentó que las tasas de infección por COVID-19 se mantienen altas y los hospitales se enfrentan a una presión elevada, además, las precauciones son necesarias ante la nueva cepa del coronavirus detectada en el Reino Unido.
Las nuevas restricciones afectan, en particular, los desplazamientos en las zonas con una alta tasa de infección cuyos residentes no podrán alejarse a más de 15 kilómetros de su domicilio sin una causa justificada.
Además, se imponen pruebas obligatorias para los que se desplacen fuera de las regiones de riesgo.
También se reduce de cinco a dos el número permitido de participantes de reuniones privadas entre personas procedentes de distintos hogares.
El Gobierno alemán decretó un confinamiento limitado desde el 2 de noviembre que contempla el cierre de bares, restaurantes, lugares de ocio y deporte. A partir del 16 de diciembre dejaron de abrir los comercios minoristas, excepto los de comestibles y artículos de primera necesidad.
Alemania es uno de los países más golpeados por la crisis de covid-19 en Europa con más de 1.78 millones de contagios y más de 35.000 fallecimientos registrados hasta este martes.
