El equipo legal encargado de la defensa del fundador de Wikileaks, Julian Assange, valora de forma positiva el ofrecimiento de asilo político por parte de México a su representado, aunque recuerdan que el periodista sigue atado a la jurisdicción británica en estos momentos.
"Evidentemente es una buena noticia porque demuestra que la comunidad internacional se preocupa por la protección de Julian Assange como periodista, ya que su caso es un atentado a la libertad de prensa a nivel internacional", señala en declaraciones a Sputnik el abogado Aitor Martínez, miembro del equipo de Assange.
El letrado observa, no obstante, que el fallo emitido este lunes por la Justicia británica "no es firme, por lo que él (Assange) todavía no puede abandonar la jurisdicción británica".
Este lunes el Tribunal Penal Central de Londres rechazó extraditar a Julian Assange a Estados Unidos debido a la frágil salud mental del periodista australiano, que conlleva el riesgo de suicido.
No obstante, la decisión todavía puede ser apelada por Estados Unidos y, además, Assange seguirá privado de libertad por lo menos hasta el próximo miércoles 6 de enero, fecha en la que se celebrará una audiencia para abordar la posibilidad de concederle la libertad condicional.
"Él sigue sometido a la jueza Vanessa Baraitser, que podrá acordar la fórmula en la que se produzca o no la libertad condicional", señala Martínez, antes de aclarar que, una vez se resuelva esa cuestión, lo siguiente es "esperar a que la resolución devenga firme".
Por ello, aunque desde el equipo legal agradecen y prometen estudiar el ofrecimiento de asilo formulado por México, por el momento Martínez se limita a comentar que "en el corto plazo lo primero es asentar la firmeza de la resolución" y "ya después se podrá analizar dónde vivirá Julian Assange, bajo qué jurisdicciones o con qué estatus".
A la espera de saber las condiciones concretas de la oferta de asilo y su viabilidad, el gesto también pone de manifiesto que un eventual rechazo definitivo del Reino Unido a la extradición de Assange puede ser utilizado por otros países un arma para proteger al periodista aunque EEUU decida tramitar solicitudes similares en esos otros estados.
"Tiene toda la lógica jurídica que si un estado con estándares judiciales y democráticos incuestionables como el Reino Unido deniega la extradición, el resto de países de la comunidad internacional debería rechazar cualquier nueva solicitud de extradición sobre la base de los mismos hechos", apunta Martinez.
En consecuencia –concluye el abogado– ya sea "en México o en cualquier otro país, resulta evidente que a partir de ahora se le tendría que proteger ante cualquier petición de extradición sobre la base de los mismos hechos que ya ha rechazado el Reino Unido".
