La reforma legislativa de Morena que no le gusta a Banxico

La reforma legislativa de Morena que no le gusta a Banxico

Ayer, la cámara de senadores aprobó por mayoría la iniciativa presentada desde el 27 de noviembre por Ricardo Monreal para reformar la Ley del Banco de México (Banxico). Tanto Banxico como la Asociación de Bancos de México (ABM) se pronunciaron en contra y argumentan que esta reforma viola la autonomía del banco central, ¿en qué consiste la reforma y porque podría abrir una disputa entre el poder legislativo y la autoridad monetaria?

 

Empecemos explicando, si alguna vez ha tenido que cambiar dólares o comprarlos, ¿se ha preguntado por qué no todos los bancos le permiten hacer esa operación?, ¿por qué la venta es a un precio superior a la compra y por qué a veces ese diferencial resulta muy grande? La respuesta está en la comisión bancaria, pero también en otros factores como el riesgo.

 

Cuando un extranjero, un turista o un migrante llega al país con dólares y paga por un bien o servicio, su moneda es recibida porque no hay ninguna ley que lo impida. Sin embargo, sí hay leyes que impiden que esos dólares sean moneda de curso legal, es decir, no pueden seguir en circulación para hacer transacciones, por ello, quienes aceptan dólares y quieren hacer uso de su equivalente deben cambiarlos en pesos que son la moneda que respalda el Banco de México.

 

Los últimos captadores de esos dólares son los bancos comerciales, instituciones financieras que se encargan de repatriar los dólares a Estados Unidos y obtener el equivalente en pesos. Hacer este procedimiento es complicado, pues las leyes del país vecino y las normas financieras internacionales exigen que el dinero que se va a repatriar tenga una procedencia lícita y que los bancos puedan probarlo. Para eso, los bancos siguen un protocolo muy estricto al comprar los dólares en circulación. Si los bancos no pueden probar la procedencia, pueden ser sancionados con multas altísimas. Es decir, el cambio de divisas es una actividad riesgosa para los bancos y el diferencial alto entre la compra y la venta es resultado de trasladar el costo del riesgo a los clientes.

 

Las autoridades de Estados Unidos han alertado a sus bancos del riesgo de comprar dólares a bancos mexicanos, por lo que los bancos norteamericanos trasladan también los costos del riesgo de la transacción o, en otros casos, suspenden sus operaciones de cambio. Si los bancos mexicanos no pueden repatriar los dólares y recuperar el equivalente, es como si los dólares perdieran su valor y por eso deciden dejar de comprarlos en el mercado. Las personas que necesitan vender o comprar dólares lo deben hacer en casas de cambio o en el mercado negro en condiciones adversas.

 

El año pasado nuestro país recibió casi 94 mil millones de dólares, como se ve en la gráfica siguiente, casi el 39% (36,438 millones) provinieron de los heroicos migrantes a través de remesas, le siguió la inversión extranjera directa (IED) y el turismo. Se calcula que sólo el 14% de los dólares fue repatriado, el resto sigue en el país “atrapado”. En otras palabras, no tiene sentido que el país reciba tantos dólares si al final no los puede intercambiar en los bancos estadounidenses.

 

Elaboración propia con datos de Banxico e INEGI

 

La reforma de MORENA obligaría a Banxico a comprar los dólares que los bancos comerciales no puedan repatriar e integrarlos a su Reserva Internacional. De esta manera, los bancos podrían ampliar su captación de dólares y disminuir el diferencial entre compra y venta lo que beneficiaría a una parte importante de la población que recibe remesas o que tiene ingresos por actividades turísticas, ya que obtendrían un mejor tipo de cambio.

 

No obstante, Banxico y la ABM se han opuesto pues señalan que entrometerse en la forma en que Banxico debe manejar las reserva es violar su autonomía. Por otro lado, aseguran que si Banxico compra los dólares que los bancos no pudieron repatriar a Estados Unidos, se le traslada el riesgo de manejar dinero de procedencia ilícita y los organismos internacionales podrían sancionar a Banxico. Si sancionan a Banxico se pone en riesgo el sistema monetario nacional en su conjunto. Pero esta negativa también deja al descubierto la vulnerabilidad de los controles y protocolos de los bancos y la imposibilidad de garantizar que sus operaciones son de procedencia lícita.

 

Los legisladores tendrán que considerar las repercusiones de la reforma antes de aprobarla, pero también, aunque los bancos no lo quieran, se deberá ampliar la intervención de la banca central en el control de operaciones ilícitas, por ahora parece que llevan una relación de solapamiento que podría oler a complicidad.

 

La reforma aprobada en el senado será turnada a la cámara de diputados que podrá rechazarla y devolverla a la cámara alta o aprobarla y enviarla al presidente para su publicación. El presidente podría vetarla, si no lo hace se sumaría a la confrontación con el banco central quien podría impugnar ante la Suprema Corte por considerar que se viola su autonomía otorgada por la Constitución. Estaremos atentos al desarrollo de la propuesta legislativa.

 

 

*Profesor-Investigador Facultad de Negocios, Universidad La Salle México

Miembro del Sistema Nacional de Investigadores

 

Twitter: @BandalaCarlos