Disturbios en Buenos Aires durante el velorio de Maradona

Disturbios en Buenos Aires durante el velorio de Maradona

Foto: Xinhua

Enfrentamientos y disturbios se registran en el centro de la capital argentina después de que la policía de la ciudad de Buenos Aires cerrara la avenida principal que conduce a la sede de Gobierno, donde es velado Diego Armando Maradona.

 

Los agentes han formado un cordón para impedir el paso de más gente, pese que miles de personas aguardan todavía para despedir al astro argentino.

 

Los incidentes se produjeron cuando la policía impidió el ingreso del público en las intersecciones de la Avenida de Mayo y la 9 de julio, a unos 700 metros de la Casa Rosada, sede del Ejecutivo, puesto que la ceremonia fúnebre

 

Quedaron afuera del perímetro miles de personas que formaban una extensa cola por más 1,7 kilómetros hacia el sur de la ciudad, según pudo comprobar esta agencia.

 

La policía dispara pelotas de goma y gasas lacrimógenos mientras avanza uno de los camiones hidrantes mientras miles de personas corren y se empujan hacia la zona de la Plaza de Mayo, donde se encuentra la sede de Gobierno.

 

La cola se encuentra desbordada a pocos metros de la Casa Rosada, donde se encuentra el presidente, Alberto Fernández, para acompañar a los seres queridos de Diego Armando Maradona.

 

Algunas personas, entre tanto, han sido detenidas sobre la Avenida 9 de julio.

 

Por decisión de la familia la ceremonia fúnebre se extenderá hasta las 16.00 hora local, si bien se esperaba la afluencia de hasta un millón de personas.

 

SOLUCIÓN PROVISORIA

 

Para permitir que todas las personas que se acercaron hasta el centro de la capital argentina puedan despedirse del exjugador, una vez concluya el velatorio el cortejo fúnebre saldrá por Avenida de Mayo hasta la 9 de Julio antes de subir a la autopista 25 de Mayo Acceso Oeste, según informan a Sputnik fuentes de Presidencia.

 

De esta manera, todos los que aguardan podrían presenciar el coche fúnebre que trasladará los restos de Maradona.

 

Mientras la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner llegaba la ceremonia fúnebre, miles de personas que quedaron fuera del perímetro aún aguardaban en la calle con la esperanza de que pueda formarse la cola de nuevo.

 

La fila ya no se respeta ni a las puertas de la Casa Rosada, donde miles de personas se agolpan en el intento de entrar a la sede del Ejecutivo para despedir a Maradona.

 

El exjugador argentino, que el 30 de octubre cumplió 60 años, falleció el miércoles por una descompensación cardíaca.

 

Maradona murió en una casa en el municipio de Tigre, al norte de la provincia de Buenos Aires (este), donde se encontraba alojado desde que fuera dado de alta el 11 de este mes tras haber sido operado de un hematoma subdural siete días antes.

 

Desde entonces permaneció bajo supervisión con un equipo interdisciplinario que lo mantuvo con asistencia médica.

 

Maradona, que jugó como delantero o mediocampista ofensivo, es reconocido como uno de los mejores futbolistas de la historia.

 

Fue campeón con la selección argentina en el Mundial de 1986 en México y subcampeón en la Copa del Mundo Italia 1990.

 

En Argentina debutó con 15 años en Argentinos Juniors y más adelante jugó con otros equipos, como Boca Juniors y Newell's.

 

En Nápoles, al sur de Italia, también es venerado por haber conseguido que el club local, el Napoli, ganara en dos ocasiones la liga italiana, conocida como Scudetto, además de la Copa Italia y el torneo de la Unión de Federaciones Europeas de Fútbol (UEFA).

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