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Mientras que a partir de este viernes en la Liga MX ya habrá acceso al público en los estadios, del otro lado del charco, en Barcelona, deberán seguir esperando para poder tener a sus seguidores en los partidos de Champions League, torneo en el que debutarán el martes.
El estadio Kraken y el Victoria ya podrán abrir sus puertas para los juegos de Mazatlán y Necaxa, a pesar de que la peligrosidad de la pandemia de coronavirus aún está latente en México, pero el Camp Nou vivirá el arranque del llamado mejor torneo de clubes en el mundo con sus tribunas vacías.
La Consellera de Salut Alba Vergés y el Secretari de Salut de la Generalitat, Josep Maria Argimon, autoridades en Barcelona, declinaron la petición del club para poder permitir un aforo controlado para el encuentro que sostendrán ante el Ferencvaros de Hungría.
La UEFA había dado luz verde para que los partidos de la jornada 1 de la fase de grupos que se disputarán la siguiente semana, pudieran tener asistencia en las gradas, siempre y cuando los gobiernos locales de las sedes de cada club lo permitieran.
“En estos momentos no sería partidario. Me costaría explicar determinadas medidas que hemos tomado y tener que abrir ahora el Camp Nou para 1000 personas, pese a que en el Camp Nou pueden mantener la distancia perfectamente. Es más un tema de la entrada y la salida del campo. No sería la imagen que yo desearía”, declaró el Secretari de Salut de la Generalitat Argimon, en un programa de Cataluña.
Aunque los catalanes buscaban que al menos 1000 aficionados presenciaran el debut del Barca en la Champions, deberán seguir esperando, ya que Europa vive la segunda ola de coronavirus, y España es uno de los países más afectados.
