Uno de los columnistas más prestigiados del Universal, Alberto Aguirre, reveló en su columna que la consulta contra los expresidentes tenía un destinatario, no dos.
Hay un pacto, asegura el columnista, entre el presidente Andrés Manuel López Obrador y Enrique Peña Nieto y que, pase lo que pase, dígase lo que se diga en las mañaneras, no habrá sanción alguna contra el priista.
Pero eso no es lo mismo que se puede decir de Felipe Calderón. Sobre él va el ataque, mediático y jurídico.
La consulta se ejecutará al mismo tiempo que en las elecciones del próximo año. Y en la normativa electoral quedará establecido como parte de los acuerdos del Consejo General del INE que la última boleta a entregar a los votantes sea la de la consulta.
Por orden de prelación, el votante primero sufragará sobre la sanción a los expresidentes y después votará por su candidato.
Si bien Andrés Manuel López Obrador no estará en la boleta electoral, si lo estará Felipe Calderón como símbolo de la corrupción.
¿Alguien votará por el PAN tras la evidente inducción?
Peor aún, para los panistas de Puebla se viene una ola de escándalos.
El gobernador anunció los avances de las investigaciones en el caso de la concesión de RUTA y en los desvíos que ejecutó el Comité Administrador Poblano para la Construcción de Espacios Educativos, el CAPCEE.
Apenas está comenzando la ópera mediática. ¿Qué pasará cuando se vea a panistas desfilar ante las autoridades judiciales?
El elector pensará en Felipe Calderón primero, con la boleta de la consulta, y luego en los ex funcionarios poblanos detenidos, a causa de la cobertura mediática. ¿Votará, entonces, por algún candidato del PAN?
Tanto López Obrador como Barbosa Huerta tienen clara la ruta política: evidenciar la corrupción del pasado.
El votante se guía por emociones en la urna electoral.
Y a través de la estrategia de Morena todo se reduce a un cuestionamiento simple: ¿votarás otra vez por los corruptos?
Los partidos satélites crecerán, Morena mantendrá su base y el PRI y el PAN caerán en sufragios a nivel nacional.
Al menos ese es el pronóstico probable.