Estados Unidos y México son de los países más afectados por la pandemia de COVID-19, colocándose en los primeros puestos a nivel mundial en cuanto a contagios y muertes a causa de este virus, situación que parece no cambiar por diversas razones.
Uno de los motivos es el deficiente trabajo de los respectivos encargados de generar estrategias para combatir la pandemia, lo que se ve reflejado en los daños a la salud que han vivido tanto estadounidenses como mexicanos.