Bajo la dirección de Genoveva Huerta Villegas, el PAN ha decrecido y el número de militantes del PES ha aumentado. A causa de ello, Fernando Manzanilla Prieto, diputado federal, pretende cumplir su primer objetivo: convertirse en legislador local plurinominal por ese partido.
Pero, además, se percibe una pulverización del voto: la ruta del exsecretario de Gobernación es ingresar a sus aliados como diputados plurinominales de diversos partidos, tal y como aconsejó a Rafael Moreno Valle en un lejano 2010, influir en muchos partidos.
Más estas acciones han causado que el PAN se debilite. Los aliados de Genoveva Huerta Villegas, presidenta del Comité Directivo Estatal del PAN, son los mismos que siguen a Manzanilla y, por tal razón, la militancia comienza a caer.
El PES pasó de 6,994 afiliados a 25,000 en solo un año. El PAN, en cambio, pasó de 24,228 a 17,683, es decir, casi perdió 30 % de su militancia.
Los partidos deben su poder a las estructuras: personajes denominados líderes que arrastran a votantes de manera corporativa. El hecho de que el PAN esté desfondándose y el PES creciendo significa que los líderes han cambiado sus simpatías.
No solo el PES, el Partido Nueva Alianza también ha crecido dramáticamente. Según los números disponibles en la página del INE, el partido turquesa pasó de 3,368 militantes a 17,000 y en el caso de Movimiento Ciudadano pasó de 7,912 a 19,207.
La semana pasada, en el Hotel Camino Real, ocurrió un cónclave de los integrantes del Partido Naranja. Acudieron Dante Delgado, líder nacional, y el dirigente en el estado, Fernando Morales, un expriista hijo del exmandatario Melquíades Morales.
La coincidencia resulta evidente: el PRI es el partido que más militantes ha perdido y estos se han refugiado en otros institutos políticos que quieren comenzar a tomar fuerza propia. El otrora “partidazo” pasó de 654,092 militantes a 4,228 registrados ante el INE.
De acuerdo con la información que se ha filtrado en el círculo del exsecretario de Gobernación, Manzanilla Prieto pretende convertirse en el presidente de la Junta de Gobierno del Congreso del Estado, respaldado por los plurinominales de todos los partidos mencionados.
La posibilidad luce lejana porque, al menos en las encuestas, el partido más cercano a Morena es el PAN y en careos particulares el marrón queda por debajo del instituto albiazul.
Sin embargo, un reclamo es constante entre los panistas y cobra sentido a la luz de los números: el descuido de Genoveva Huerta a la militancia y la confrontación con grupos del partido al seguir la causa de Manzanilla Prieto. El PAN se desfonda y los partidos satélites crecen.