
Desde que inició la pandemia de COVID-19 en México, los cubrebocas han tomado un rol principal en la protección de la sociedad ante cualquier riesgo de contagio; sin embargo, esto también ha dado pie a que el comercio irregular de este artículo médico sea cada vez mayor.
A raíz del costo que representa adquirir un cubrebocas de calidad que cumpla con los requisitos sanitarios, muchos poblanos han optado por comprar los artículos que se ofertan en puestos ambulantes, mismos que representan un riesgo latente de contagio.