Un hombre terminó hospitalizado tras recibir un martillazo en la cabeza luego de pedirle a un adolescente que no se metiera en la fila para un trampolín.
Los hechos ocurrieron el pasado 20 de agosto en la playa de Pont-de-Roide en el río Doubs, al este de Francia, cuando un hombre y sus hijos esperaban su turno para brincar en el trampolín, pero un adolescente se coló en la fila colocándose delante de ellos.
Según reportaron medios locales, el padre de familia pidió al joven que respetara la fila; sin embargo, el agresor reaccionó violentamente, dándole un puñetazo. Momentos después, el chico llamó a sus amigos, uno de ellos traía un martillo de construcción con el que le dio un golpe en la cabeza.
Pese al golpe, el hombre permaneció consciente y fue trasladado al hospital en donde le diagnosticaron una depresión en el cráneo.
Las autoridades dieron a conocer que los dos adolescentes, de 16 y 17 años, fueron arrestados y que horas antes de la agresión habían sido multados por no portar cubrebocas en el autobús que usaron para llegar a la playa.
Empero, ambos fueron puestos en libertad sin ningún proceso judicial en su contra, por lo que ahora los familiares de la víctima exigen un castigo para los menores.
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