En una reunión informativa celebrada en Ginebra, Suiza, este viernes 21 de agosto del 2020, el director del Departamento de emergencias sanitarias de la Organización mundial de la salud (OMS), Dr. Mike Ryan, afirmó que México no conoce la verdadera extensión de la pandemia en el país y considera que los números reales de contagiados y fallecidos por el SarsCov2 están subrepresentados.
México es uno de los países más golpeados de América y el mundo en términos de casos de coronavirus. Al día 20 de agosto, las autoridades de salud reportaron 543,806 casos confirmados y 59,109 decesos por la enfermedad, aunque a partir de los modelos estadísticos usados hasta ahora, se estiman aproximadamente 580,000, casi 40,000 casos más que los confirmados.
Ryan detalló que la tasa de pruebas hechas en México es de aproximadamente tres personas por cada cien mil. Un número bajo comparándolo con las 150 por cada cien mil reportados por Estados Unidos, convirtiendo a México en uno de los países que menos pruebas realiza. Ello es el producto de la política pública implementada por la Secretaría de Salud y su vocero, el subsecretario Hugo López-Gatell, quien ha defendido las presuntas ventajas de la estimación estadística por encima del conteo exhaustivo.
Aun con este déficit en las mediciones, México ocupa el 7to lugar con más casos en el mundo y presenta un tasa de letalidad en el país de 10.9% al 20 de agosto de 2020 (aproximadamente uno por cada 100 habitantes), 5 puntos por encima del promedio global propuesto por la OMS, de 5.4%, aunque aún debajo de países como Reino Unido (12.8%) e Italia (13.8%). El país alcanzó su punto más alto el día 28 de junio de 2020, con una letalidad aproximada de 12.4%, según datos del Centro Europeo para la prevención y control de enfermedades (ECDC).
Durante el discurso diario emitido por el Dr. Tedros Adhanom, Director de la OMS y promotor de las pruebas masivas desde el inicio de la pandemia, recalcó la importancia de no bajar la guardia y continuar con las medidas de distanciamiento social con miras a paliar el reciente repunte de contagios por COVID-19 que algunos países, entre ellos México, han experimentado tras una paulatina apertura a la actividad económica.
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