Ha sido una semana de revelaciones, será histórica. Hemos comprobado lo que intuíamos, lo que en su momento denunciamos, como las maniobras del gobierno para hacer quebrar sistemáticamente a PEMEX, a Luz y Fuerza o a CFE; cómo desmantelaron a las empresas estatales como Ferrocarriles Nacionales, Teléfonos de México, DINA, los ingenios azucareros, la banca y la petroquímica para entregarlas al sector privado. Hicieron lo mismo con carreteras, puertos y aeropuertos, era una verdadera podredumbre.
Esta semana se reveló como se compraban conciencias, como se vendía la prensa para “embobar” al pueblo, mientras los pobres sufrían la desventura de estos gobiernos rapaces, ni Antonio López de Santa Anna ni Porfirio Díaz, en su nivel más alto como sátrapas, traicionaron así a la nación.
Entre estos obscuros negocios se encuentra el del Puerto de Veracruz. El compañero presidente Andrés Manuel anunció acciones para revocar la concesión que APIVER tiene para la operación portuaria. La prensa chatarra (como la ha calificado López-Gatell) rabiosamente empezó a alegar que APIVER es una empresa del Estado y que por tanto el presidente estaba mal informado, pero ¿cómo funciona APIVER y quien tiene la razón?
En el sexenio de Salinas de Gortari se profundizó el desmantelamiento del Estado que inició De la Madrid Hurtado; para entregar la operación portuaria se modificó la Ley de Puertos en 1993 de modo que se crearon empresas denominadas Administraciones Portuarias Integrales (API’s) cuya finalidad era que concentraran las operaciones portuarias para más adelante facilitar su venta.
La Administración Portuaria Integral de Veracruz (APIVER) se hizo cargo de la gestión del puerto mediante un contrato de concesión en 1994 cuya duración sería de 50 años. No obstante, en el año 2018 (sin que venciera todavía el contrato) extrañamente a pocos días de que el régimen neoliberal perdía por primera vez las elecciones, se prorrogó la concesión hasta 2094.
¿Pero el puerto es o no operado por el Estado? Sí y no. En el papel, APIVER es una sociedad anónima cuyo socio es principalmente el Estado y por tanto el director es designado por el presidente, recibe presupuesto federal y como contraprestación entrega al gobierno impuestos de la operación. En la realidad, los neoliberales resultaron muy hábiles para entregar los puertos sin vender las API’s. La ley les permite hacer cesiones de todas y cada una de las operaciones del puerto y eso es lo que se ha hecho: APIVER ha entregado todas las operaciones a privados.
Además de que son las empresas privadas que manejan el puerto de Veracruz las que inciden de facto en el nombramiento de su director, para muestra la gestión de más de una década de Juan Ignacio Fernández Carvajal (removido por Andrés Manuel en 2019). Para mayores referencias, es hermano de Jose Antonio Fernández, “el diablo”, miembro de la alta dirección de la empresa FEMSA, el mismo que dijo estar dispuesto a financiar un golpe contra AMLO y de quien se rumora otorga recursos a la organización de ultraderecha FRENAAA. ¿Será venganza por arrebatarles el negocio que su familia tenía con el puerto?
¿Qué tan lucrativo es APIVER? En la gráfica 1 se muestran los ingresos anuales desde 2014, ha sido notable el crecimiento, en 2018 obtuvo casi 3 mil millones de pesos, el año pasado presentó una caída, pero sigue estando cercano a 2 mil millones. Sin embargo, hay un manejo muy opaco de sus recursos, en su estado de Cuenta Pública, la mayor proporción de los gastos se concentra en el renglón “Otros gastos”, es decir, los que no se desglosan ni se detallan. Este rubro pasó de representar el 51% de los ingresos en 2014 hasta el 82% en 2018. En pocas palabras, 8 de cada 10 pesos que ingresaron al puerto se gastaron en “quien sabe qué”.
Así, el resultado neto del ejercicio (ingresos menos gastos) sólo representa entre el 2.3 y 4%; esto es, por cada peso que ingresó al puerto, la empresa se quedó con 2 centavos. ¡Es claro que el negocio no es para APIVER! sino para las empresas privadas a las que se entregó la operación, ¿se entiende a qué nos referimos con privatización?
Elaboración propia con datos de los estados financieros dictaminados de APIVER
Pero, ¿por qué la premura de extender hasta 2094 la concesión a APIVER después de que AMLO ganó la elección? Pues para que APIVER tuviera facultades legales para extender las cesiones de las operaciones en el puerto a las empresas privadas, las que verdaderamente se están embolsando el dinero. Esta fiestecita tiene que parar y tendrán que devolver al pueblo lo robado.
Sin duda, estamos viviendo la Cuarta Transformación de la vida pública del país. Seguramente nos enteraremos de cosas peores; por eso, hoy más que nunca se requiere la unidad del pueblo; los oligarcas traidores no se dejarán arrebatar sus privilegios, esta lucha la tendremos que dar junto a nuestro compañero presidente. Y que se entienda bien: para esto es que elegimos a Andrés Manuel, para frenar el saqueo. Al corrupto no le gusta el cambio, al pueblo bueno sí.
*Profesor-Investigador Facultad de Negocios, Universidad La Salle México
Miembro del Sistema Nacional de Investigadores
Twitter: @BandalaCarlos
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