El Báltico occidental registra una sensacional invasión de medusas Aurelia aurita, apodada sombrilla o medusa de cuatro ojos, afirmó este miércoles a Sputnik la bióloga alemana Cornelia Jaspers, especialista del centro de investigación oceánica Helmholtz Geomar de Kiel.
"Es algo que varía año tras año. El año anterior, por ejemplo, hubo pocas aurelias, este año hay muchas. Eso depende principalmente de las corrientes marinas, las condiciones climáticas y el viento, ya que las medusas no pueden nadar independientemente contra la corriente", reveló la también catedrática de la Universidad Técnica de Copenhague.
La experta subrayó que las medusas de esta especie no representan una amenaza para los seres humanos, y su presencia en el mar este año indica que "el agua está bastante cálida y ellas reciben mucha comida, por lo que alcanzaron grandes tamaños muy rápidamente".
Sin embargo, la científica agregó que, además de las medusas sombrilla, los biólogos también encontraron especies que no son típicas en el Báltico, como el cetanóforo tentaculado, que este año llegaron dos o tres meses antes de lo normal, y actualmente son extremadamente comunes.
Mnemiopsis leidyi, o cetanóforo americano, es una especie de cetanóforo tentaculado (medusa) que habita en las aguas costeras del oeste del Atlántico, pero se ha establecido como especie invasora en las regiones europeas y de Asia occidental.
Estos animales solo existen en aquellas regiones del Báltico donde el nivel de salinidad del agua es alto, pues se trata de una condición necesaria para su reproducción.
"La aparición de medusas de otras regiones es, por supuesto, preocupante, ya que son competidoras serias en consumo de alimentos para las especies de peces nativos que se alimentan de plancton, como el arenque y la espadaña del Báltico. Una medusa puede poner hasta 12.000 huevos al día, por lo que forman rápidamente masas densas de animales", resaltó la especialista.
Según Jaspers, los biólogos ya han encontrado restos de medusas en los estómagos de los peces del mar Báltico, aunque las medusas no son un alimento para los peces en condiciones normales, por lo que los especialistas aún tienen que determinar las causas de dicho proceso y su alcance.