Legislar es el acto de elaborar o impulsar leyes que beneficien a la sociedad en su conjunto, dejando de lado intereses personales.
Muchos diputados no lo entienden, pero otros lo llevan a un grado infantil y ridículo; el claro ejemplo es la “diputada” federal Nayeli Salvatori Bojalil, a quien muchos seguramente recuerdan más por los vulgares programas de radio que conducía.
Por si no lo recuerda, estimado lector, “Nay” Salvatori llegó a la Cámara Baja gracias a la marea vinotinto provocada por el ahora presidente Andrés Manuel López Obrador. Obviamente, argumentos no tenía para llegar al Congreso de la Unión.
En su insípido camino por San Lázaro, Salvatori Bojalil se ha distinguido más por escándalos que por un trabajo legislativo. El último ridículo de la prominente “diputada” fue ocupar el pleno del Congreso para hacer un “Tik Tok”… Es en serio, un “Tik Tok”.
Obviamente, la “brillante” idea de Salvatori fue duramente criticada y -como siempre- la exreyna (jajaja) de la radio poblana montó un show cómico-mágico-musical para defenderse, afirmando que el tuitero “Vampipe” la había metido en problemas por editar su ya de por sí ridículo “Tik Tok”.
Ahora, “Nay” Salvatori demuestra que los problemas graves que vive el país son menores al “daño” emocional que vivió y absurdamente propondrá castigar a usuarios de redes sociales fotografías, videos y audios originales.
Es en serio, eso propondrá la “legisladora” de un partido que ya ni existe.
Pero parece que a Salvatori Bojalil ya se le olvidó que precisamente el dejar en ridículo a la gente, usar un lenguaje soez y promover infinidad de antivalores fue lo que le dio fama entre un público que escaso intelecto y que gusta de las cosas simplonas y recicladas.
En las diferentes estaciones en las que “trabajó” tuvo a la burla como bandera. En esos momentos, obviamente ni siquiera le importaba dañar la reputación de la gente. Por eso, resulta infantil y ridícula su actitud actual.
Lo mejor que podría hacer la sociedad es bloquear de todas sus redes sociales a la “diputada” Salvatori, pues así no solo evitaría “ofenderla”, sino que además dejaría de ver tanto contenido “basura”.
El “Don nadie” que critica a Lalo Rivera
Errores y virtudes tienen todos los políticos, pero si en el PAN hay un perfil que la gran mayoría de panistas respeta, ese sin duda es Eduardo Rivera Pérez.
Por supuesto, Lalo Rivera es incómodo a los intereses de la “presidenta” del PAN Estatal, Genoveva Huerta, como fue incómodo en su momento Jesús Zaldívar, hoy líder municipal del blanquiazul muy a pesar de “la Jefa”.
Por este motivo, Genoveva ha comenzado una campaña de desprestigio contra Rivera Pérez que, al igual que en otras ocasiones, no funcionará, ocupando a personajes que solo en su casa conocen.
Uno de ellos es un tal Héctor Montiel, quien grabó un video criticando a Rivera Pérez y sus aspiraciones rumbo a 2021.
¿En verdad no tenía otro esquirol Genoveva Huerta?
Poco impacto tuvo ese video y sinceramente, amable lector, quien escribe esta columna lanzaría una crítica, pero no tengo la menor idea quién es Héctor Montiel.
PD: Un beso hasta el cielo, papá.