
Si hay reaperturas de negocios, restaurantes y bares, hoy como ha sido advertido, el jueves 16 de julio las cifras de contagio explosionarían. Las últimas horas de este domingo se convirtieron en un cúmulo de mensajes sobre el destino de Puebla ante la contingencia del Coronavirus COVID-19. Por un lado, mientras la presidenta municipal Claudia Rivera Vivanco puso su apuesta sobre la mesa: el mantenimiento de las medidas de restricción que no violen la ley junto a la protección sanitaria en la capital, los empresarios agrupados en el Consejo Coordinador Empresarial mandaron un mensaje en el que solicitaron mesas de trabajo para iniciar la reapertura inmediata.
La petición de los empresarios no coincide, sin embargo, con la situación sanitaria de Puebla. Las cámaras están pidiendo la reapertura escalonada de negocios en el momento de mayor riesgo en la entidad. Si hubo una cancelación de actividades cuando la tasa de contagios y fallecidos era de 250 por cada 100,000 habitantes, el 1 de mayo, hoy es ilógico planear una reapertura con una tasa de 439 contagios por cada 100,000 poblanos: dos veces más que cuando los restaurantes cerraron por decreto.
Algunos de los restauranteros sumados a la protesta de cierre abrirán este lunes con restricciones sanitarias. La Cámara Nacional de la Industria Restaurantera en Puebla confirmó la apertura de restaurantes para este 6 de julio, pero en la noche de este domingo lamentó que no haya una fecha estimada para la reapertura, aunque el ayuntamiento no les clausurará. Empero, el director de Protección Civil, Gustavo Ariza, advirtió que en Puebla el semáforo de índice de contagios en la capital sigue en rojo, es decir, no han cambiado las condiciones del distanciamiento social.
En un video transmitido este domingo, a través de las redes sociales del ayuntamiento, Ariza Salvatori exhortó a comerciantes establecidos y no establecidos considerados no esenciales, a permanecer cerrados o con servicio a domicilio. No obstante, no habrá cierres. El viernes el ayuntamiento informó que no habría clausuras para restaurantes que ofrezcan servicio en mesas. El Consejo de Comerciantes del Centro Histórico, en su último mensaje, advirtió que sí abrirá hoy sus locales.
Entre las restricciones que la alcaldesa ha instruido, para amainar el contagio del COVID-19, pueden contarse la cancelación de partidos de futbol jugados en Unidades Habitacionales o Juntas Auxiliares y que son focos de contagio por el sudor y contacto de los jugadores, la clausura de puestos de venta con irregularidades, vigilancia policial -de la mano con la secretaria de Seguridad, Lourdes Rosales-, mercados donde se aplican mecanismos de sanitización, programa de apoyo a microempresarios y un crematorio municipal trabajando intensamente.
De acuerdo con la información que ha facilitado la autoridad municipal, la apertura de calles en el Centro Histórico -otra petición del gremio comercial- ocurrirá hasta que el semáforo epidemiológico pase a naranja en la ciudad. No obstante, la búsqueda de los empresarios por reabrir sus negocios choca con la realidad.
La noche de este domingo, el subsecretario de Salud Hugo López-Gatell reveló que Puebla ha acumulado 12,049 casos de infectados por la cepa COVID-19, que le colocan como la cuarta entidad con el mayor número de contagios. Y en una tabla presentada por primera ocasión en esta conferencia de prensa, la entidad aparece con un acelerado crecimiento de contagios.
Según el indicador, entre el 1 de marzo y el 15 de mayo, en los albores de la pandemia en el país, los contagios pasaron de 180 a 250 por cada mil personas, unos 250 por cada 100,000 el 1 de mayo. El mayor crecimiento ocurrió al corte del 20 de junio, con 439 contagios por cada 100,000 habitantes.
El 1 de mayo, el gobierno del Estado publicó un decreto en el que advirtió la aplicación de sanciones a los negocios de comida y venta de bebidas que no cierren sus espacios de venta física, para dedicarse únicamente a las entregas a domicilio y servicio para llevar. Esta medida ejecutada para cortar la cadena de contagio del COVID-19 ocurrió cuando apenas los contagios eran de 200 por cada 100,000 poblanos. Hoy que la probabilidad de contagios se ha duplicado, los empresarios del sector pujan por reabrir.
Según Marco Antonio Prósperi Calderón, presidente de la Cámara Nacional de la Industria y el Comercio en Puebla, este lunes van a abrir unos 3,000 negocios para evitar quiebres, aprovechando que el ayuntamiento no ejecutará medidas sancionatorias. No obstante, el semáforo epidemiológico mantiene a la ciudad en color rojo, lo cual significa el máximo riesgo de transmisión del virus y la imposibilidad de reanudar las actividades no esenciales.