El gobernador de Puebla, Luis Miguel Barbosa Huerta, sentenció que es urgente aplanar la curva de contagios de COVID-19 en el estado, luego de que este fin de semana se presentaron 1,059 nuevos casos de coronavirus en la entidad, reiterando que se vive el peor momento de la crisis sanitaria.
En rueda de medios, el mandatario alertó que la sociedad se ha volcado en las calles y eso podría evitar que la curva de contagios se aplane, advirtiendo que aunque el sistema de salud poblano es fuerte, será complicado atender a todas las personas que busquen atención médica a causa del COVID-19.
Llamó a la sociedad a regresar al confinamiento y poner de su parte para que los contagios bajen en la entidad, además de pedir a las personas que deban salir a la calle por necesidad, usar cubrebocas y tomar todas las medidas de prevención, pues insistió que es alarmante el aumento de casos en Puebla.
De la misma manera, Barbosa Huerta informó que la directora de Comunicación Social del Gobierno de Puebla, Verónica Vélez Macuil, dio positivo a COVID-19, destacando que está en buen estado de salud y en reposo en su casa. En este sentido, el gobernador descartó cualquier problema de salud propio y sentenció que si llega a presentar síntomas se hará la prueba de coronavirus de inmediato.
Esto luego de que el secretario de Salud, José Antonio Martínez García, informó que Puebla llegó a la cifra de 7,432 casos positivos de coronavirus, estando activos 1,942. Desafortunadamente, han fallecido 835 poblanos por este virus.
