Es grave la situación en Puebla y el mundo. El rebrote es prácticamente un hecho anunciado y desde el gobernador poblano Luis Miguel Barbosa, hasta el director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS) Tedros Adhanom Ghebreyesus, los líderes gubernamentales coinciden en que el comportamiento social está llevando la crisis sanitaria a una fase más grave y peligrosa.
El mandatario advirtió este viernes en su conferencia de prensa habitual que la movilidad de los últimos días tras la decisión del Gobierno Federal de poner fin a la Jornada de Sana Distancia ha elevado los contagios de manera alarmante. Solo de jueves a viernes se reportaron 381 nuevos contagios del COVID-19 y 27 fallecimientos.
Barbosa Huerta detalló que la movilidad comenzó a desbordarse en Puebla el primero de junio tras el regreso de los trabajadores a las industrias. Por eso consideró que no hay condiciones para el regreso de los trabajadores a las grandes empresas, pues los contagios podrían ocurrir de manera exponencial.
“No hay condiciones hoy, este día 19 de junio de 2020 para que se reabran en su funcionamiento las industrias. La industria automotriz, de la construcción y todos aquellos negocios que puedan provocar contacto entre las personas, no lo hay y lo voy a seguir sosteniendo porque es el papel que debemos jugar nosotros, quienes somos gobernantes de un ámbito territorial, de un pueblo, de una sociedad, tenemos que ser claros”.
Su enérgica advertencia coincide con lo que observa la OMS a nivel internacional. Tedros Adhanom advirtió apenas unas horas después del mensaje de Barbosa en Puebla, que la pandemia de coronavirus está entrando en una “nueva y peligrosa fase” después de que en la última jornada se registrara una cifra récord de más de 150,000 infecciones diarias en el mundo.
Así, el crecimiento exponencial en Puebla y en las naciones se debe al mismo diagnóstico referido por el gobernador: movilidad que representa desconfinamiento, contacto y contagios. Desde el 1 de junio analizó que empezaron a ocurrir actividades en zonas de alto contagio. "Estas son las consecuencias de tal descuido", dijo.
“Tememos que ser claros, vean ustedes que si es a finales de este mes cuando todo se va a mover sin límites. Y si ya llegamos a un pico ayer de 381 contagiados, no nos sorprendamos que podamos llegar a 500 diarios, y entonces sí el colapso de todo sistema de salud estará presente”, advirtió.
La advertencia del gobernador coincide con la del líder mundial de la Salud. Tedros Adhanom precisó que casi la mitad de los casos se reportaron en América, con elevados números también en el sur de Asia y Oriente Medio. “El virus sigue expandiéndose rápido, todavía es mortal y mucha gente es susceptible de contraerlo”.
De la misma forma que el gobernador cuando señaló como grave el comportamiento social ya de contacto directo, Tedros admitió que “mucha gente comprensiblemente está harta de estar en casa, y los Estados quieren abrir sus sociedades y economías”, pero hay que mantener una vigilancia extrema.
“Continúen manteniendo distancia con los demás, quédense en casa si se sienten enfermos, sigan cubriéndose la nariz y la boca al toser, lleven mascarilla cuando sea conveniente y no dejen de lavarse las manos”, advirtió.
La advertencia del director de la OMS contrasta con la política pública federal, pues pidió a las redes sanitarias internacionales seguir enfocadas en la búsqueda, aislamiento y, sobre todo, ejecución de “pruebas, pruebas y más pruebas. Cuidando de todos y cada uno de los casos, monitoreando y poniendo en cuarentena cualquier contacto con ellos”.