Con la difusión del plan de "nueva normalidad" impuesta por el Gobierno de México, las empresas se han preparado para el regreso gradual a sus actividades. La industria automotriz no es la excepción y desde el 1 de junio algunas plantas reactivaron actividades, pero no todos los estados han aceptado el regreso.
Marcada como una de las actividades esenciales en México, la industria automotriz fue uno de los primeros sectores para el plan de "nueva normalidad" instaurado bajo el mandato del presidente Andrés Manuel López Obrador. Durante el mes de mayo, las plantas tuvieron que adaptarse a los nuevos protocolos para evitar contagios cuando se reactivaran las actividades.
Desde el 18 de mayo, las industrias y plantas tuvieron que atenerse a los lineamientos descritos en el Diario Oficial de la Federación (DOF), así como implementar los propios de acuerdo a las tipificaciones dadas por el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), como el Manual para el retorno saludable, seguro y confiable al trabajo de la Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores (AMDA).
Así, al término de la Jornada de Sana Distancia el primero de junio 5,770 plantas y empresas dentro del sector automotriz reanudaron actividades, con previa autorización del IMSS, permitiendo que miles de trabajadores regresaran a sus empleos.
Los estados de Baja California, Sonora, Guanajuato, Coahuila, San Luis Potosí, Aguascalientes, Estado de México, entre otros, tuvieron un regreso gradual. Por otro lado, Puebla ha sido el único estado donde no se ha permitido el regreso al decretar el semáforo rojo; Miguel Barbosa, gobernador de Puebla, aseguró que las industrias reabrirían a partir del 15 de junio.
"Derivado de la alerta máxima de contagios de coronavirus, del 1 al 14 de junio seguirá la suspensión de actividades no esenciales, automotriz y construcción, y se mantienen las medidas sanitarias en centrales de abasto y mercados", declaró en un comunicado el gobierno del estado.
Aún es pronto para determinar la efectividad de las medidas implementadas por los estados y las plantas, pero se espera que la reapertura de actividades agilice la reactivación económica de México que se vio tan afectada ante la pandemia de COVID-19.
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