En medio de la epidemia que a la mayoría de las familias nos tiene en confinamiento y a muchos otros/as obligados a salir porque no tienen alguna otra oportunidad para no hacerlo, ha llegado la fecha que recuerda la heroicidad del General Ignacio Zaragoza en la Batalla de Puebla del 5 de mayo de 1862.
La conmemoración sin duda será diferente, no sólo en Puebla, donde no pudo ser convocado el tradicional desfile conmemorativo; lo será seguramente también, en Estados Unidos, donde las festividades para recordar esta gesta histórica del Ejército de Oriente, son muy importantes, incluso mayores que las que recuerdan la Independencia de México.
Por ello importante no olvidar los hechos sucedidos justo un día antes, el 4 de mayo de 1862 en Atlixco, “a cinco leguas de Puebla, fundada en un fértil valle (…) maravilloso, casi de primavera (…) con que la villa es rica y sus vecinos de mucho trato…” se enfrenta a una batalla en contra de los conservadores que pretendían sumarse al Ejército Francés.
Hecho decisivo en la epopeya del 5 de Mayo, que hoy también es parte de la historia nacional, reconocido por el Presidente Benito Juárez quien consideró que sin el triunfo del 4 de mayo en Atlixco, no hubiera sido posible la victoria del 5 de mayo en Puebla.
Derivado de ello creó una medalla reconociendo la aportación de los atliscenses que señala: “Derrotando a los traidores el 4 de mayo, contribuyó eficazmente al triunfo alcanzado en Puebla en contra del Ejército Francés el 5 de mayo de 1862”.
“La batalla inició a las 3am con un tiroteo, a las 8 estaba en su plenitud, la gente conservadora de Márquez, rebasó los Cañaverales, en donde la infantería del General Cosme Varela y la caballería se batió sobre los flancos enemigos (…) al medio día el General Antonio Carbajal ocupó la Hacienda La Trapera, allá por la fábrica El Volcán colocando su infantería y la caballería preparando la emboscada en los Cañaverales (…) los liberales habían derrotado a los conservadores que iban a Puebla a ayudar a los franceses que ya cantaban su victoria. El triunfo de Atlixco evitó un ataque simultáneo por el oriente y sur de Puebla…” (Reyes Abacum, Cápsulas Históricas, 2017)
“Cábele a Atlixco la gloria de haber preparado el triunfo sobre las fuerzas francesas, del 5 de mayo de 1862 en Puebla, pues sabiendo el General Ignacio Zaragoza, que del Sur venía el general don Leonardo Márquez con crecido contingente reclutado en pueblos de la tierra caliente, para apoyar el ataque francés a la Capital del Estado, ordenó al general don Antonio Carbajal que (…) detuviera a todo trance a los traidores (…). Así se hizo, inicio una terrible lucha que concluyó con la derrota y desbandada de Márquez y los suyos que ya no pudieron acercarse a Puebla…” (Díaz Solís Espiridión, 1938)
Este hecho histórico fundamentó que en 2010 -en el marco de las celebraciones del Bicentenario y Centenario de nuestros movimientos fundacionales- por unanimidad de votos, el Congreso del Estado de Puebla aprobara el Decreto en el que se declara “Dos Veces Heroica la Ciudad de Atlixco”.
En el contexto actual, vale recordar estos hechos que representan, no solo un gran orgullo para Atlixco; también, dan cuenta de la aportación histórica, cultural y social que Atlixco ha dado a Puebla y al país. El objetivo, que sirva a las y los jóvenes de hoy y a futuras generaciones, para rescatar su interés por la historia y fundamentalmente el sentido de identidad y pertenencia a esta noble tierra: Atlixco.
Palabra de Mujer Atlixco
@rgolmedo
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